El tanteo de Rafael Gómez, opción imposible

Un rumor recorrió ayer la ciudad echando aún más leña al proceso de venta del club, pero si aparece el nombre de Rafael Gómez, eso es echar gasolina al fuego.

Cuando el empresario dejó de formar parte de la propiedad del CCF en 2006, cedió todas sus acciones a José Romero a coste cero, pero guardándose una opción de tanteo en el caso de que Prasa decidiera vender el club en el futuro. Ésa era una de las garantías que se habían guardado los tres integrantes del triunvirato creador de la SAD hace ahora más de una década. Se trataba de una cláusula para dar valor a la inversión que los tres empresarios habían hecho durante su etapa de permanencia en el club, además de garantizar una oportunidad de continuidad en caso de que el negocio fuera rentable.

Así, en caso de que el dueño decidiera traspasar su paquete accionarial, el ahora alcaldable tendría la opción de recuperar el control de la sociedad igualando la mejor oferta que llegara a las oficinas de Prasa. En este caso, José Romero no pretende sacar ningún beneficio económico de la operación, sino que se contenta con deshacerse de los 8.5 millones de euros que acumula la sociedad en deudas, tanto a corto como a medio plazo.

Pero la opción de que el ahora líder de Unión Cordobesa regrese al fútbol un lustro después de su salida parece una utopía. Durante la rueda de prensa del pasado día 23 de diciembre en la que presentó su candidatura a la alcaldía, Gómez señaló que el Córdoba le había costado "mucho dinero", y bendijo la entonces cerrada venta al grupo italiano "porque si el dueño así lo ha considerado, será porque es lo que tiene que hacer".

Además de querer mantenerse al margen de la operación, el empresario ha atravesado por momentos muy complicados en sus negocios, por lo que no es probable que pueda embarcarse en una operación de tal calado económico.