Un regalo de Navidad anticipado

El Córdoba B se llevó el derbi provincial ante el Pozoblanco tras aprovechar un error de Díaz, que no calculó bien para blocar un centro de Ismael que Dani Cabanillas, en boca de gol, empujó a la red. Con el triunfo, los blanquiverdes se colocan en una cómoda novena plaza a ocho puntos del descenso, mientras que el cuadro vallesano acaba el año en lo más alto de la clasificación tras aprovechar el empate de la Balompédica Linense frente al Conil (0-0).

La gran novedad en el once inicial del filial era la titularidad de Alberto Montávez, ya que Coca -sólo se perdió el partido en Mairena- forma parte del primer equipo tras la baja por lesión de Raúl Navas. Por su parte, los vallesanos salieron con su once de gala con la inclusión de Raíllo en lugar de Alberto Fernández.

La primera mitad estuvo muy igualada y el exceso de centrocampismo fue la nota predominante. En definitiva, el duelo era el típico derbi. Sólo un error o una jugada a balón parado decantaría el resultado a favor de uno u otro equipo. Pasada la media hora de juego, el partido mejoró. Quero fue el primero en probar a Alberto, y un minuto después llegó la mejor ocasión de la primera parte del lado local, cuando el disparo de Dani Cabanillas salió rozando el palo izquierdo de la portería de Díaz. Aún así, la última ocasión fue para los discípulos de Rafa Berges, pero Hugo Díaz se topó de nuevo con la intervención de Alberto Montávez.

Tras el paso por los vestuarios, el Pozoblanco buscó con más ahínco la portería cordobesista. A los tres minutos, Hugo Díaz estrelló su lanzamiento en el palo izquierdo de la meta blanquiverde. El filial intentó salir a la contra ante un cuadro pozoalbense que tenía a gente muy rápida y habilidosa en la parcela ofensiva. Uno de ellos, el incombustible Quero probó de nuevo al guardameta blanquiverde sin éxito.

Pero fue el Córdoba B el que se puso por delante en el marcador. Una internada hasta la línea de fondo de Ismael por la banda izquierda acabó con un medido centro que sorprendió a Díaz, y Dani Cabanillas sólo tuvo que empujar a las mallas.

El tanto cordobesista llevó al Pozoblanco a coger las riendas del partido. Los vallesanos se volcaron en ataque, pero la ordenada defensa blanquiverde despejó todas las acometidas de los pozoalbenses. Rafa Berges empezó a mover su banquillo, quitando a José Gutiérrez para meter más dinamita en ataque con la entrada de Aguayo. El filial se defendía muy bien y buscaba una contra para sentenciar el pleito. Pero a falta de once minutos para el final, el cuadro vallesano gozó de una gran ocasión por medio de Aguayo, aunque su cabezazo salió lamiendo el palo izquierdo de la meta cordobesista.

En los últimos minutos, Berges quemó su último cartucho con la entrada de Peque en sustitución de Juanfer. La jugada le pudo salir bien, ya que Peque tuvo el empate en sus botas, pero su lanzamiento salió ajustado al palo izquierdo local.