El jefe de la defensa ha vuelto. Lejos queda ya la grave lesión de rodilla que lo tuvo en el dique seco durante toda la temporada pasada -debutó en la última jornada, en Gerona, jugando 79 minutos- y un verano en el que tuvo que entrenarse en solitario al verse dentro del ERE que tenía previsto ejecutar el club. Pero todo eso no ha servido más que para hacer mejor a Gaspar, uno de los culpables de que el CCF sea el segundo conjunto menos goleado del campeonato en este notable arranque. Ahora su prioridad es "crecer con el equipo", seguir haciendo historia y entusiasmando a una afición que en los últimos años se había "distanciado" un poco al no recibir apenas alegrías.

-Cuartos, a un punto del liderato y jugando muy bien al fútbol. La cosa no podía arrancar mejor.

-La verdad es que estamos muy contentos por el comienzo que hemos tenido. Sabíamos que teníamos un equipo joven, con mucha gente nueva, un entrenador nuevo con un estilo diferente y el comienzo iba a marcar mucho al equipo. Nos está dando mucha confianza, creemos en nosotros y estamos creciendo, demostrando que se están haciendo bien las cosas para poder mirar hacia arriba.

-Para un grupo tan remozado y joven es lo mejor que podía pasar. Un mal comienzo hubiera sido un palo difícil de superar.

-Veníamos de un verano complicado, de una situación difícil en el club y un comienzo malo hubiera instalado el nerviosismo muy rápido y no nos hubiera dejado trabajar bien. En pretemporada se vio que el equipo estaba muy bien trabajado y lo ha demostrado ahora en este comienzo de temporada. Está claro que esto es sólo el comienzo, pero era vital empezar así. Aun así, no podemos bajar los brazos porque queda muchísimo y hay que seguir trabajando a muerte.

-El CCF juega al ataque, de forma atrevida, pero lo que más destaca hasta ahora es su fortaleza defensiva: 4 goles en 6 partidos.

-Es un estilo totalmente diferente al anterior, y muy ofensivo. Pero se está viendo que trabajamos del primero al último, presionando muy bien y eso hace que estemos encajando pocos goles, algo que es importante para sacar los partidos. Se ve un equipo bien posicionado y con ganas de presionar, hacer bien las cosas y no dejar al contrario tranquilo en los 90 minutos.

-Y eso que se ha hablado mucho de la defensa: que si es lenta para jugar tan adelantada, que si no va bien en la estrategia...

-Hay buenos jugadores ahí detrás para poder solventar el año perfectamente. El equipo es más atrevido y con este sistema la defensa tiene que estar muy atenta para que no le creen problemas. Pero el equipo está trabajando bien y sólo nos queda mejorar. Es normal que podamos atravesar momentos complicados en los partidos, pero con la gente de atrás, con esa mezcla de jóvenes y veteranos, podemos sacarlos adelante.

-Una de las claves para al final estar arriba es precisamente encajar pocos goles.

-La portería a cero siempre te va a dar más opciones de sacar partidos adelante. Estamos rentabilizando los goles porque arriba sabemos que tenemos gol y gente capacitada para crear ocasiones y materializarlas. Si el equipo está serio, esto nos dará mucho. Pero tiene que ser un trabajo de todo el equipo, no sólo de los de abajo. Hay que seguir así, apretando los dientes.

-¿Cómo se lleva tanto cambio de portero? El domingo le toca otra vez a Alberto.

-No pasa nada, pasamos mucho tiempo juntos, nos conocemos muy bien, entrenamos y a Alberto ya es el tercer año que está aquí. Empezó jugando, luego entró Carlos, que lo estaba haciendo muy bien, pero Alberto tiene unas condiciones enormes y lo va a hacer fenomenal. Estamos todos ilusionados con su vuelta, porque se lo merece, e intentaremos apoyarlo para que todo salga bien.

-¿Mejor con Carlos Arias o con Alberto García? El segundo ya fue cuestionado tras las primeros jornadas...

-Pero para nada tuvo culpa de los goles en esos partidos. Nos enfrentamos a buenos equipos, no pudimos sacar la victoria y siempre hay alguien a quien se cuestiona. La gente tiene estar tranquila porque el que entiende de fútbol sabe que Alberto es un gran portero. Entre todos vamos a buscar la victoria para seguir arriba.

-Centrándonos en usted, el año pasado se lo pasó en blanco y ahora es el único que lo ha jugado todo en Liga. Cómo cambia la vida.

-Estoy muy contento porque he pasado un verano... Tras la lesión, que me costó todo el año, he pasado un verano complicado con algunos compañeros. Pero en el fútbol pasas del blanco al negro en pocos días y ahora me ha tocado vivir esta situación. Estoy disfrutando y voy a seguir luchando para jugar lo máximo posible.

-Lo ha tenido que pasar muy mal. Serían unos meses muy duros.

-Ya con la lesión, con la recuperación, con las dos operaciones que tuve que pasar, lo pasé mal, pero eso son cosas de fútbol. Pero luego lo del verano, tras todo un año sin jugar, con dos años de contrato por delante y verme fuera... Era doloroso, pero afortunadamente se pudo arreglar, pude entrar en la dinámica del grupo y estoy muy contento por seguir aquí.

-¿Se vio haciendo otra vez la maleta, tras tantos años fuera y tras la apuesta tan fuerte que hizo por volver a casa?

-Hombre, por la cabeza se me pasó que tenía que buscarme las habichuelas en otro sitio. Siempre he  deseado volver a mi ciudad, a mi equipo, pero si no puede ser, no puede ser. Uno quiere jugar y había que intentar buscar un salida, pero al final cambió todo y estamos aquí con muchas ganas de crecer con este equipo.

-Hablando del próximo partido, ¿os da tiempo a soñar con el liderato entre sesión y sesión de entrenamiento?

-Nosotros, en el vestuario, hablamos de los objetivos que nos marcamos a corto plazo. Y ahora el que toca es verte en lo más alto de la tabla. A todo el mundo que le preguntes si le gustaría verse en el liderato te va a decir que sí; nosotros lo tenemos en la mano y no lo queremos dejar escapar. Tenemos un partido por delante contra un filial que juega bien al fútbol, pero vamos a hacer todo lo posible para ganar y poder seguir viéndonos arriba. Y ¿por qué no los primeros?

-De momento, el equipo está batiendo récords y, lo que es más importante, entusiasmando de nuevo a la afición.

-Últimamente, por diferentes motivos, la ciudad y el equipo se habían distanciado un poco. Era algo normal porque no se le estaba dando lo que el aficionado quiere y es normal que se descuelgue. Nosotros sabíamos que el reto más importante que teníamos por delante esta temporada era ilusionar a la gente, y lo estamos consiguiendo poco a poco. El martes por la tarde, la gente estaba muy contenta al ver tantos aficionados en el entrenamiento, poco a poco se está viendo más ilusión y para nosotros eso es importante. Esperemos que entre todos podamos hacer grande a este equipo.

-Paco dijo en Huesca que no había excusa para que el domingo el estadio no estuviera a reventar. El presidente confía en que haya al menos 10.000 espectadores. Lástima de la hora...

-La hora es una pena porque para nosotros hubiera sido importante jugar a una hora más acorde para ver un partido de fútbol. Pero la gente tiene que ser consciente de que en este momento necesitamos de su apoyo y su asistencia al campo. Nos gustaría ver un estadio con diez o doce mil aficionados para seguir creciendo, y que su apoyo nos ayude a seguir arrriba y hacer algo bueno este año. Con nuestro trabajo y su esfuerzo ojalá podamos ver una grada repleta muy pronto.

-De todas formas, lo que sí está claro es que la semilla ya la ha puesto el equipo.

-Ése era el primer objetivo: hacer las cosas bien para enganchar a la afición, porque el momento de la entidad es delicado y ese respaldo es importante. Hemos creado esa ilusión, estamos haciendo buen juego y hemos tenido un buen arranque. Eso es lo que queremos para todo el año, aunque luego las cosas salgan mejor o peor. Ahora está en mano de ellos seguir ilusionados, seguir al equipo en este estadio.

-Que haya suerte y siga la racha el mayor tiempo posible.

-Ojalá que siga así y nos podamos ver en lo más alto de la tabla para seguir creciendo.