La nueva era debe seguir la estela de los triunfos

Después de la marejada siempre llega la calma. Y es que el Pozoblanco no vive tranquilo desde la pasada temporada. En poco más de un mes de competición ha pasado de todo, pero la renuncia de José Antonio Neva a seguir en el cargo para marcharse al Puerto Real -curiosamente junto a Pedro Curtido y Pablo Niño-, hicieron pensar en un acuerdo a dos o tres bandas. Pero eso ya es pasado y, desde el jueves, el conjunto vallesano ya tiene a un nuevo técnico. Aunque de nuevo tiene bien poco, ya que el plantel pozoalbense volverá a ser dirigido por el técnico sevillano Moreno Rosillo, que ya dirigió al cuadro cordobés en la temporada 2004-05.

No obstante, el Pozoblanco llega en su mejor momento de la temporada al San Bartolomé de Mairena, ya que sigue invicto y encadena dos victorias consecutivas. Los hispalenses no se fían de un rival que querrá consolidarse en la parte privilegiada de la tabla.

El preparador del cuadro vallesano podrá seguir las evoluciones de su equipo desde la grada del estadio sevillano y no contará con ninguna baja para este choque. De este modo, el último fichaje de la era Neva, el punta argentino Gambeta, podrá realizar su estreno liguero en la segunda mitad.