Janssens, Aguilar y Pérez imponen su ley en las bodas de plata de la Subida a Montoro
Automovilismo
Más de un centenar de pilotos estuvieron presentes en la vigesimoquinta edición de esta prueba de montaña cordobesa
Montoro fue este fin de semana el epicentro del automovilismo con la celebración de su tradicional Subida de Montaña. En su 25 edición, la prueba cordobesa reunió a cerca de un centenar de pilotos bajo el amparo de la Copa de España y el Andaluz de Montaña. El trazado, rápido y técnico, se convirtió de nuevo en escenario de duelos apasionantes que mantuvieron en vilo a la afición.
El gran protagonista en turismos fue Humberto Janssens, que no dio opción a sus rivales y se adjudicó el scratch absoluto en la categoría reina con un tiempo de 3:51.564. El granadino volvió a demostrar su fiabilidad y velocidad, doblegando a pilotos de enorme nivel como José Manuel Segura Hidalgo, a 15,11 segundos de diferencia, y Juan José García Ramírez, a 20,2 segundos, quienes completaron un podio de mucho prestigio.
En monoplazas, el dominio correspondió a Francisco José Aguilar Cisneros, que inscribió su nombre en el palmarés montoreño tras una actuación impecable con un crono de 3:50.313. El piloto de la Escudería RS Sport superó a Esteban Perea Oriola, segundo a 3,81 segundos, y a Juan Manuel Camacho Sánchez, tercero a 6,82.
La emoción también se trasladó a los Car-Cross, donde el más rápido fue José Miguel Pérez Santiago con 3:57.141. Tras él, se clasificó Francisco Javier Avilés Serrano a 1,80 segundos y Juan Manuel Ramírez Martínez, de la Escudería del Mármol, cerró el podio en tercera plaza a +3,16 segundos.
Los vencedores por clases fueron los siguientes: en Clase II, José Manuel González Cabrera; en Clase III, Jesús David Jiménez Ruiz; en Clase IV, Bartolomé de los Llanos Agudo; en Clase VI, Bartolomé Arévalo González; en Clase VII, José Manuel Gómez Mora; en Clase VIII, Juan Pedro Godoy García; en Clase IX, Rafael Aljama Peinado; y en Clase X, Manuel Murillo Becerra.
En las copas especiales también brillaron nombres propios. El Trofeo Junior fue para Juan Manuel Ramírez Martínez, el Trofeo Fémina para Alba María Camacho Beret, el de Históricos para Amador Jaén Guillermo y el Máster +50 para Humberto Janssens, que redondeó así un fin de semana perfecto en Montoro. Por su parte, la Copa Diputación de Córdoba tuvo como vencedor a Francisco Javier Avilés.
Con este resultado, Montoro no solo celebró sus bodas de plata con la montaña, sino que reafirmó su condición de cita indispensable en el calendario nacional y andaluz. El calor del público, la impecable organización y el espectáculo en pista hicieron de esta edición una de las más recordadas de los últimos años.
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