"Si ganas, cualquier filosofía es buena"

El partido del domingo en el Mediterráneo será especial para Fidel Chaves, el último en realizar el viaje entre Córdoba y Almería, algo que hizo este verano gracias a una contraprestación económica de apenas medio millón de euros para el club blanquiverde y un suculento contrato de larga duración para él. Pero eso, que garantiza el futuro, no tiene por qué hacerlo también con el presente, menos aún con el panorama deportivo de la entidad. De hecho, los albirrojos vuelven a vivir esta temporada en la zona de descenso y el jugador onubense no termina de encontrar su mejor juego mientras ve cómo su ex equipo lleva todo el curso asentado en los puestos de play off. Ahí desea que acabe, pues no guarda rencor alguno a un vestuario en el que estuvo un par de campañas y en el que dejó un buen grupo de "amigos", entre los que están Deivid y Domingo Cisma, a los que no podrá ver este fin de semana por sus lesiones.

Con esos condicionantes, Fidel no escondió que el choque será "especial" porque en Córdoba estuvo "muy feliz" durante dos años, aunque el zurdo se centra ya en el Almería porque "nos estamos jugando mucho tras la última derrota y necesitamos salir de los puestos de descenso". La primera oportunidad le llega ante un CCF que atraviesa su peor momento del curso, "baches que pasan mucha factura", si bien apenas ha afectado a los blanquiverdes porque "enganchó varias victorias consecutivas para meterse en la zona alta de la tabla; ahora suma cinco sin ganar y sigue estando en puestos de play off".

¿Tiene Fidel la receta para aumentar la sequía cordobesista? Pues parece que no, si bien el zurdo fue claro al advertir que "si lo supiera no lo diría aquí, intentaría hablar con el míster para hacerlo el domingo". "Si algo tiene es que es un equipo difícil de batir que lleva cinco sin ganar, pero solo ha perdido uno. Ya lo era el año pasado ganando nueve partidos fuera de casa, son compactos y juegan muy juntos, con gente honrada y eso lo transmite el míster", explicó Fidel, que apela a crecer "desde la humildad y el respeto y, cuando empiece el partido, jugaremos las cartas y esperemos quedarnos con los tres puntos".

"Es una categoría tan igualada que si te descuidas un poco cualquier rival te gana o acumulas meses sin ganar", continuó el onubense, que se lamentó del amplio número de errores que ha tenido el Almería en estos tres primeros meses de la competición. Unos problemas que también alcanzan a su nivel de juego, que tocó fondo en La Romareda, donde el ex cordobesista firmó "el partido más flojo" de su nueva etapa como jugador del Almería: "Individualmente me estoy encontrando bien, pero siendo justo y sincero el otro día no hice un buen partido, no queda otra que mirar al siguiente. Tengo ganas porque es un buen rival para volver a ganar y coger ese plus de confianza".

Algo que pasa sobre todo porque el equipo encuentre una línea de regularidad de la que ha carecido hasta el momento. "La filosofía, por mi experiencia, es ganar. Si ganas, cualquiera es buena, pero al no ganar se ven mucho más los errores y las lagunas. Eso nos está costando puntos y se penaliza mucho, además somos el equipo más tarjeteado de la Liga y hay que mejorar", argumentó Fidel, que si algo tiene claro es que "la posición no es la que nos gustaría pero salvo Zaragoza, si estamos metidos, somos un equipo difícil de batir".

Una condición que comparte con el Córdoba, un equipo al que el onubense desea "toda la suerte del mundo y que estén arriba al final, pero naturalmente este domingo defenderé a mi equipo". Es ley de vida.