El espejo que González compró para El Arcángel

El Girona fue la gran revelación de la pasada temporada en Segunda División. Tras vivir en la zona baja un año antes, el conjunto catalán sorprendió a propios y extraños al colarse en un play off del que sólo el Almería, en la final, lo apartó del sueño de llegar a la élite. Un éxito inesperado que el CCF quiso comprar para sí durante este verano al fichar a dos de sus mejores futbolistas -Luso y Benja-, tentar a otro (Tébar) y hasta apostar por el mismo patrocinador: RDImpagos. La combinación suena bien, aunque ahora habrá que esperar a ver qué ocurre en el terreno de juego.

Con el mismo patrón de austeridad y una plantilla corta para fomentar la polivalencia y la promoción de la cantera, el CCF busca lo que a punto estuvo de lograr el Girona. Después de atar a Samu, los blanquiverdes anunciaron justo al final del play off la contratación de Benja -a pesar de su lesión- y un acuerdo total con Luso supeditado a que ningún equipo de Primera se interesara por el pivote. Incluso, la red de Carlos González tentó con fuerza a Marcos Tébar, aunque el mediocentro encontró finalmente acomodo en el Almería.

No contento con pescar en una entidad que ni siquiera optó por competir para retener a sus mejores piezas, el Córdoba se hizo hasta con el patrocinador del Girona la pasada campaña. Tras un puñado de campañas sin manchar la camiseta, el acuerdo con RDImpagos por una temporada fue una pieza más para completar el espejo en el que los blanquiverdes decidieron mirarse para este ejercicio.

Y, la verdad, es que no es malo el cristal elegido. El Girona acumuló hasta el pasado domingo, cuando perdió ante Las Palmas en Montilivi (0-2), una racha de 46 jornadas ininterrumpidas sin salir de los puestos de ascenso directo o play off -desde que ganó en la segunda fecha de la pasada Liga en Guadalajara (1-5)-, la que, sin duda, es la mejor de su historia. Un hecho para nada grave, entre otras cosas porque sólo un gol lo separa de la sexta posición que ocupa el Lugo, al que además ya ha ganado a domicilio (1-2) en este campeonato.

Como apunte baste decir que el Girona ocupa a estas alturas los mismos puntos (10) que tenía la campaña anterior. Y eso que Ricardo Rodríguez ha perdido piezas importantes y no ha podido contar con un hombre clave en su esquema como Jandro. Unas circunstancias que le han empujado a variar el sistema de juego a un 4-3-3 que está funcionando a la perfección, incluso mejor fuera que en Montilivi. Algo que tiene que mejorar, al igual que esa costumbre de empezar por abajo en el marcador que ojalá no se pierda en Córdoba.