Sensaciones positivas para Álex Morón

Sensaciones muy positivas. Ese es el balance que ha realizado el joven portero pontanés Alejandro Morón de su debut con la selección nacional juvenil de balonmano, que tuvo lugar el pasado fin de semana en Aix-en-Provence (Francia), durante la disputa del Torneo Internacional IV Naciones, una actividad en la que los pupilos de Alberto Suárez fueron de menos a más, cosechando en la última jornada un muy meritorio empate ante el conjunto anfitrión, vigente campeón continental.

El portero de 18 años y 2,01 centímetros, que forma parte de la disciplina del Ángel Ximénez, aunque habitualmente juega con el conjunto cordobés de La Salle -filial de los pontaneses- en la Segunda División Nacional, acudió a la convocatoria avalado por su destacada progresión deportiva, que incluyó varios éxitos de relumbrón la pasada temporada, entre ellos el subcampeonato de Europa con la selección juvenil de balonmano playa y el subcampeonato de España con la selección andaluza en el Campeonato Estatal de Selecciones Territoriales disputado en tierras asturianas.

Lejos de acusar los nervios del debut, Morón, que ya fue hace un par de años internacional en cuatro ocasiones con la selección española promesas, inició su periplo en tierras francesas con una buena actuación en la derrota española ante la potente selección de Dinamarca (24-17), un partido en el que jugó 40 minutos, firmando numerosas intervenciones de gran mérito. En este encuentro los Hispanos juveniles, que contaban con algunas bajas importantes con respecto al equipo que logró el bronce en el Europeo de Polonia del año pasado, acusaron la inactividad del parón navideño ante un rival de entidad que venía rodado y con su equipo de gala tras disputar un torneo previo en Alemania. Al día siguiente, frente a la selección de Catar, el portero pontanés volvió a jugar otros 40 minutos, siendo uno de los artífices de la victoria del combinado hispano (29-21), que evidenció una franca mejoría respecto al día anterior. Por último, España cerró su participación en la Provenza francesa con un empate con sabor a victoria (22-22) ante los anfitriones, un encuentro duro y muy difícil que los Hispanos juveniles jugaron de poder a poder, y en el que Alejandro Morón jugó 25 minutos en la segunda parte, dejando también un buen sabor de boca al cuerpo técnico nacional.

Concluida esta actividad, el seleccionador Alberto Suárez, uno de los más laureados de las categorías inferiores del balonmano español, debe evaluar en los próximos meses el rendimiento de los jugadores del 96-97 de cara a futuras competiciones, y más concretamente, ante la celebración del Campeonato del Mundo Juvenil que se disputará en agosto en Rusia, una cita para la que el joven portero pontanés ha presentado su candidatura, y donde también intentarán estar presentes el almeriense Agustín Casado -ex del BM. Pozoblanco- y el palmeño del Córdoba BM, Samuel Gómez, como representantes del balonmano andaluz.