Fútbol | Tercera RFEF

El Salerm Puente Genil toma oxígeno a costa del Cartaya (1-0)

  • Un gol de Félix Chenkam al inicio del segundo tiempo otorga tres puntos de oro a los rojinegros

Cuenca lucha por el balón en la jugada que le terminó costando la expulsión.

Cuenca lucha por el balón en la jugada que le terminó costando la expulsión. / Tino Navas

El Salerm Puente Genil apeló al orgullo y al coraje para sacar adelante su partido ante el Cartaya, un duelo condicionado por la inferioridad numérica en la que quedaron los rojinegros al filo del descanso, por una injusta expulsión de Cuenca, y el tanto anotado por el camerunés Félix Chenkam al inicio de la segunda mitad, que a la postre, decantó el encuentro a favor de los de Keko Rosano.

La primera parte fue poco vistosa en términos generales, con un voluntarioso equipo pontanés bien ordenado pero carente de acierto ante la portería visitante, y un Cartaya que gozó de la posesión del esférico durante muchos minutos, pero que tampoco expuso demasiado de medio campo en adelante. Los primeros acercamientos peligrosos fueron para los locales. En el minuto 18, Salva Vegas, uno de los mejores del equipo, probó fortuna con un remate cruzado que sacó Adri, y poco después Carlos Cuenca lo intentó ejecutando por encima del larguero un libre directo desde la frontal del área.

Sin embargo, la ocasión más clara del cuadro pontanés llegó pasada la media hora. Amín peleó por un balón en la banda izquierda, le ganó la partida al defensa y asistió al área, donde Salva, con todo a favor, ajustó su remate con la derecha a la base del palo, aunque el balón acabó saliendo fuera. Del Cartaya no se tuvieron noticias en ataque hasta el minuto 37, con una volea de Lolo sin la dirección adecuada.

Todo se encaminaba plácidamente al 0-0, pero en el minuto 41 llegó la polémica. Carlos Cuenca fue a disputar un balón dividido con un rival y en el choque, quedó lesionado y tendido sobre el césped. Para incredulidad de los espectadores, el árbitro, el jiennense Casas Martínez, esperó a que el ariete gaditano se levantara para mostrarle la amarilla. El delantero le mostró su enfado pidiendo al trencilla que observara su pierna ensangrentada a consecuencia de la acción, y éste, ante la protesta, optó por mostrarle la segunda y expulsarle. La jugada exaltó al banquillo local y al público. Keko Rosano vio la roja directa y la afición despidió al árbitro con una sonora bronca al término del primer acto.

Pero ante la dificultad, el Salerm se conjuró para sacar adelante el partido haciendo dicho el bueno de que con diez se juega mejor que con once. El camerunés Chenkam, que había salido al césped en el intermedio sustituyendo a Mario, fue el encargado de cambiar el signo del partido. Tellado botó una falta con temple al punto de penalti y allí el africano, libre de marca, conectó un cabezazo cruzado para batir a Adri.

El gol descolocó a los onubenses, y dos minutos después, Salva Vegas estuvo a punto de marcar el segundo con un testarazo que salió fuera. El preparador del Cartaya decidió mover su banquillo, y con la frescura de los recién incorporados al terreno de juego, los visitantes tomaron el control del juego ante un Salerm replegado que se multiplicaba para tapar huecos y además, tratar de salir con peligro a la contra.

Miguelito dio un aviso con un remate cruzado desviado de puños por Cristian, poco después Carlos chutó con intención buscando la escuadra y Cerpa tuvo el empate con un disparo lejano que tocó en el larguero, pero el Salerm Puente Genil, merced a su fenomenal trabajo colectivo mantuvo a raya a sus adversarios y tomó oxígeno en los últimos minutos con la expulsión de Manuel tras una dura entrada sobre Salva Vegas. Ya en los últimos instantes apenas se jugó. Una volea de Cerpa y un remate fuera del delantero de Alameda fueron los últimos acercamientos antes de un pitido final, que permite respirar a los pontanos cortando la racha de derrotas que venían arrastrando en el arranque liguero.

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