"Rafa sabrá manejar la presión"

"Espero que Rafa sea capaz de canalizar la presión y hacer un gran campeonato". Así de claro se muestra Luis Villanueva, el director técnico de la Federación Española de Natación y uno de los principales avalistas del cordobés, una medalla segura en sus pronósticos para el Mundial de Roma.

Porque Villanueva llegó a la RFEN para poner paz después de la convulsa etapa de Mauricio Coconi en el cargo. El carácter del italiano provocó un enfrentamiento entre el grupo de trabajo de Barcelona y el equipo que se entrenaba en las instalaciones de la Federación en Madrid, una disputa que pilló a Rafa Muñoz en medio de un fuego cruzado. El cordobés lo pasó mal, y su fiasco en los Juegos de Pekín llegó después de alguno de los episodios más duros de esa disputa. Ahora, todo es distinto. El cordobés vive una nueva etapa tras su marcha a Marsella y la RFEN vive un remanso de paz desde que Villanueva llegó a la dirección deportiva.

Quizás por eso, el nuevo responsable de la RFEN pronosticó antes de partir hacia Roma nueve medallas, dos de ellas en la piscina. Una de ellas tiene escrita el nombre de Rafa Muñoz, y Villanueva no oculta que "espero que haga una gran competición".

Porque lejos de molestarse por la marcha del cordobés a Francia, el director técnico le restó importancia apuntando que "el objetivo es saber dónde se entrenan, qué hacen y que podamos disponer de ellos. No me importa dónde esté. El mundo es global". Quizás por eso entiende los malos momentos que el nadador del Navial ha pasado en las últimas semanas, "algo que le puede pasar a cualquiera, algo natural. Todos tenemos altibajos y puede que haya pasado un mal momento en su estado de ánimo".

Sin embargo, el máximo responsable técnico de la RFEN ha notado a Rafa "bien de ánimo, descansando y poniéndose a punto para hacer un buen campeonato". De hecho, y pese a que los últimos dos meses han estado rodeados por ciertas dudas, Villanueva estima que el cordobés no tiene "nada que superar. No he notado nada que rompa su concentración, aunque también es cierto que no estamos juntos continuamente". "No hay nada en su caso que no sea el de todo el que tiene una responsabilidad alta encima".

Responsabilidad… o presión. La carga mediática que ha recibido el nadador del Navial desde que fulminó los cronos en abril ha podido hacer mella en un chico que en marzo cumplió apenas 21 años. La obsesión por la medalla de oro en 50 mariposa, su anunciado reto con Phelps en el hectómetro y su descarado deseo de batir al genio de Baltimore han podido jugar en su contra, aunque Villanueva opina que "no creo que tenga tanta presión, aunque puede ser positivo siempre que la presión esté enfocada en el trabajo". "Es lógico que se hayan creado unas grandes expectativas sobre su actuación en Roma, pero creo que es lo suficientemente maduro para llevar ese exceso de presión a hacer un gran campeonato. Además, lo vamos a ver muy pronto, porque debuta el primer día en los 50", apunta un hombre que confía ciegamente en el mariposista del Parque Cruz Conde.

Y eso que por rumores no ha faltado. En las últimas semanas, distintos foros de internet han hablado de malos momentos psicológicos del cordobés, de dudas por la polémica generada durante la guerra de los bañadores e incluso de una lesión que podría hacer peligrar su concurso en el Mundial. Rafa ha guardado un sepulcral silencio durante este tiempo, mientras que su entorno más cercano se ha limitado a descartar cualquier incidencia. Villanueva habla de "rumores gratuitos" que "ni siquiera me han llegado", dudando completamente de su veracidad.

Así, el director técnico prefiera analizar sin más las opciones de Rafa Muñoz, que en Roma competirá en 50 y 100 mariposa, además del relevo 4x100 estilos. "En 50 es el número uno del ranking mundial y con una gran distancia sobre el segundo. Es el favorito y es el momento de que sea capaz de dar el máximo en una situación en la que quizás no se había visto nunca antes", apunta Villanueva, mientras que los 100 "son un caso diferente". Después de que Phelps batiera el récord del mundo con 50.22, 24 centésimas menos que el mejor tiempo del cordobés, el técnico sabe que "hay otros por delante, e incluso hay nadadores que cuando compitan con los nuevos bañadores estarán por delante, así que no es el favorito. Estará en la final y ahí tendrá que pelear, pero son casos diferentes".