Cuatro equipos cordobeses ocupan los puestos de descenso: el Peñarroya, el Priego, el Egabrense y el Montalbeño. De ellos, sólo el Peñarroya parece recobrar la confianza en la permanencia. La situación de los representantes de la provincia es delicadísima y el torbellino de los malos resultados se ha llevado por delante a todos los técnicos. El Montalbeño era el único del citado cuarteto que mantenía al mismo inquilino en el banquillo. Hasta ahora. Paco Soto presentó la dimisión y ahora el club busca un sustituto. El que más suena es Félix Ruiz.
Antes, esa historia se repitió en el Peñarroya, al que llegó Antonio Carnero en sustitución de Marcelo Carreras; el Egabrense, donde Julio Serrano dejó su sitio a Pepe Hueso, y el Priego, al que accedió Couñago para suplir a Kempes.
Ahora le ha tocado el turno a Paco Soto, que al término del encuentro ante el Coria puso su cargo a disposición del presidente, Juan Estepa. "La situación es muy complicada y le dije que si él tenía una solución, yo no ponía ningún inconveniente", dice el entrenador. Para Soto, la campaña no empezó bien porque tras hacer una buena temporada hubo desbandada de jugadores en una plantilla "confeccionada por el director deportivo, Fernando Cantillo, y en la que primaba la juventud. No mejoraba lo que había. Era gente joven que por falta de liquidez no estaban respaldados por jugadores de más experiencia".
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