Pacheco, del 'red' del amarillo
El malagueño, objeto de deseo del CCF, apostó por el Alcorcón, donde no acaba de demostrar su valía
El 12 de agosto, en la ofrenda floral a San Rafael, Carlos González soltó uno de sus habituales órdagos y dijo que "o vienen Dani Pacheco y Uli Dávila o no viene nadie". Incluso el presidente aseguró que ya tenía el visto bueno del futbolista para arribar a El Arcángel en cuanto quedara liberado del compromiso que aún mantenía con el Liverpool. Pero al final el malagueño voló rumbo a Alcorcón. El último día del plazo de fichajes, el cuadro alfarero hizo oficial su fichaje, de forma que el sábado estará sobre el césped… pero como enemigo.
Pacheco fue uno de los primeros nombres en la lista de futuribles del CCF. Se apeló entonces a las supuestas buenas relaciones existentes entre el club blanquiverde y la entidad de Anfield a cuenta de la presencia de Pepe Reina y, en su momento, de Pedro Campos como integrante del equipo de trabajo de Rafa Benítez. El caso es que el vínculo sólo ha dado como rendimiento la cesión de aquel fiasco llamado Andras Simon, aunque el malagueño parecía una buena oportunidad para recuperar esas relaciones. El propio Reina, de visita en Córdoba el 9 de julio, recomendó vivamente su fichaje, aunque el meta aún no sabía que el Liverpool le abriría la puerta camino a Nápoles.
Pacheco acababa contrato con los reds el 30 de junio de 2014 con unas cifras que alcanzaban el millón de euros por temporada, pero en Anfield no contaban en absoluto con él y ambas partes buscaban una salida. El jugador de Pizarra firmó a los 16 años un contrato por seis temporadas, pero ahora, a los 22, su carrera estaba en peligro de estancarse, ya que en las cuatro últimas campañas apenas había jugado 51 partidos. Entre 2009 y 2011 apenas jugó 14 encuentros con el Liverpool. En el tramo final de esa campaña 10-11 llegó su primera cesión al Norwich, de la Championship inglesa, donde sumó seis participaciones (2 goles). En la 11-12 llegó su primer préstamo a España, jugando 12 partidos con el Rayo en Primera (11 en Liga y uno en Copa), mientras que el año pasado sumó 19 con el Huesca en Segunda (3 goles).
Con ese curriculum a las espaldas, Pacheco quería encontrar al fin la estabilidad y ahí estaba la opción del CCF, con la que el jugador y (sobre todo) sus representantes jugaron. Porque desde el principio, y a pesar de las palabras de González, el que había tomado ventaja era el Alcorcón, porque los agentes del jugador preferían tenerlo cerca de Madrid, considerando que el ámbito de influencia sería mayor en la capital. De hecho, el club alfarero dio por hecho el acuerdo a finales de julio "a falta de unos flecos" que pronto quedaron dibujados. La LFP abrió un expediente por el que llegó a estudiar su posible descenso administrativo a Segunda B por irregularidades en su conversión en SAD, lo que avivó el interés del CCF.
Nada era verdad. Cuando la LFP dio el visto bueno a la continuidad del Alcorcón en Segunda, el club comenzó a cerrar operaciones. De hecho, incluso antes de rescindir con el Liverpool, Pacheco ya se estaba entrenando a las órdenes de Miguel Álvarez. Sólo entonces González dio por perdido al jugador que había anunciado sí o sí. Llegó Germán, el otro Pacheco, pero Dani prefirió el amarillo.
Con el tiempo, visto lo visto, tampoco era para tanto. Sólo lleva jugados 365 minutos (7 partidos). Ni un gol, ni un solo disparo… Pacheco es un elemento más en el desastre ofensivo que es el Alcorcón. Aunque no hay que decirlo muy alto, vaya a ser que la bestia despierte ante el que pudo ser su equipo.
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