Ona Carbonell apunta al podio

Ona Carbonell acabó segunda en el preliminar del solo técnico en sincronizada, y admitió haberse sentido "muy bien" durante toda la rutina en el que fue el primer día de competición de los Mundiales de natación de Budapest.

La catalana se quedó a 1,6336 puntos de la principal favorita, la rusa Svetlana Kolesnichenko (94,029), a la que superó en impresión artística (28,3000 por 28,1000), pero no en los elementos (36,0893 por 37,5229).

"Pude notarlo, sentirlo y expresar mi historia sobre el agua, la historia de una serpiente", comentó Carbonell, quien interpretó con mucha solvencia una composición de Peter Gabriel para la película La última tentación de Cristo. "Me noté en el papel de la interpretación durante todo el solo. Pude controlar muy bien los elementos técnicos y crecerme en la parte artística, así que estoy contenta y satisfecha de mi valoración", afirmó la experimentada nadadora, de 27 años. En la lucha por las medallas la barcelonesa pugnará con la japonesa Yukiko Inui y la ucraniana Anna Voloshina.

Prácticamente sin descanso, Carbonell abandonó a la carrera la piscina para poder comer algo y prepararse para su siguiente intervención, ya que un par de horas después volvió a zambullirse, esta vez junto a Paula Ramírez, debutante en una gran competición, para defender la rutina del dúo técnico. La pareja española finalizó quinta en el preliminar de la rutina técnica, aunque espera mejorar en la final de mañana.

Carbonell y Ramírez lograron una puntuación de 89,2965 puntos, y se quedaron a 1,4 de las ucranianas Anna Voloshina y Yelizaveta Yakhno, que con 90,6940 marcaron la línea de las medallas. También las japonesas, con Yukiko Inui y Mai Nakamura (90,1304), fueron mejores que las españolas. La mejor puntuación fue para la pareja rusa formada por Svetlana Kolesnichenko y Alexandra Paskevitch (95,0062), mientras que las chinas Tingtin y Wenwen Jiang obtuvieron la segunda mejor nota (92,90333).