Tenis l Torneo de Chennai

Nadal, en cuartos sin sudar

  • Ganó con contundencia al estadounidense Rajeev Ram en su choque de octavos

Rafael Nadal, al que le bastaron una hora y ocho minutos para doblegar al estadounidense Rajeev Ram, por 6-2 y 6-1, completó con su victoria el pleno de españoles en cuartos de final del torneo de Chennai, dotado con 436.000 dólares en premios.

Nadal se sumó así a Carlos Moyà y a Guillermo García-López, que será precisamente su adversario en la lucha por alcanzar las semifinales.

Ram, de 23 años y que ocupa el puesto 252 de la ATP, poco pudo hacer ante el contundente juego del actual número dos del mundo. Cuatro puntos directos de saque y un setenta por ciento de eficacia con su primer servicio fueron las bazas principales del manacorí en el choque de ayer.

Nadal busca resarcirse de las decepciones de temporadas anteriores. El año pasado sucumbió en las semifinales de este torneo ante el belga Xabier Malisse, que acabaría proclamándose campeón, y en su primera comparecencia en esta cancha india, en 2004, fue eliminado en primera ronda por el holandés Schalken.

Con anterioridad, García-López derrotó en un disputado partido, de más de dos horas y media a Eschauer. Los dos primeros sets fueron igualados y se resolvieron con un break final en los momentos decisivos para cada uno de los jugadores. Con 5-4 en el marcador, el de La Roda cedió el servicio y permitió adelantarse al austriaco en el marcador (6-4).

En la segunda, las tornas se cambiaron y con 5-5, el español quebró el servicio de su rival, séptimo cabeza de serie de la prueba, y mantuvo después el suyo para igualar la contienda (7-5).

En la tercera y definitiva, la cosas estuvieron más disputadas de inicio. García-López comenzó con break, pero Eschauer se lo devolvió, mientras que en el tercer juego el español desaprovechó dos opciones para adelantarse.

Desde ahí hasta el final, la paridad se mantuvo, dada la solidez de ambos con su saque, hasta llegar al tie-break, que se resolvió a favor del español, que ahora tendrá que superar un duro escollo.

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