Loreto es el tapado

José Luis Rodríguez Loreto es el hombre elegido por Emilio Vega para liderar el nuevo proyecto del Córdoba en Segunda División. El director deportivo blanquiverde quiere repetir ahora con el sevillano la apuesta que ya realizó con Paco Jémez en su primera etapa como responsable técnico. Para ello tendrá que convencer a Carlos González, cuyas preferencias pasan por contratar a un entrenador con más experiencia en la categoría, con Quique Setién como principal candidato y Luis César Sampedro como favorito entre los que quedan en la recámara. De momento, el leonés ha conseguido que el presidente mantenga un encuentro con su candidato la próxima semana, del que a buen seguro saldrá el nombre del jefe del vestuario para la temporada 15-16, ya sea en la figura del exjugador cordobesista o haciendo valer su propia opinión.

Si algo ha caracterizado siempre a Emilio Vega es que es un hombre valiente en sus decisiones. No dudó a la hora de aceptar su vuelta a El Arcángel tras una exitosa campaña en el Elche y asumió como propio también el reto del ascenso como único objetivo posible para el próximo ejercicio. Ahora va un poco más allá. Quiere que el nuevo Córdoba lo dirija un hombre que hasta la fecha apenas acumula tres años de experiencia en los banquillos, y en una categoría menor como la Tercera División. ¿Les suena de algo esta historia? Es un currículo incluso superior al que en su día trajo por primera vez a Paco Jémez como responsable del primer equipo blanquiverde, en verano de 2007 y pocos días después de lograr el retorno a Segunda en Huesca con Escalante. El hoy flamante técnico del Rayo Vallecano apenas había estado una campaña en el RSD Alcalá madrileño, también en Tercera División. Entonces la apuesta no salió del todo bien, pues el club destituyó al cordobés tras la jornada 31 con el equipo en pleno declive; luego José González amarró de forma agónica la permanencia en aquel epílogo de infarto entre Anoeta y el Rico Pérez de Alicante.

Porque Loreto, al que le une una buena amistad con Emilio desde que coincidieron en el inicio de sus carreras en el propio Córdoba de Segunda B -formaron parte de las plantillas de las campañas 93-94 y 96-97-, sólo acumula tres años en los banquillos de Tercera. Todos en equipos modestos del fútbol aragonés. Empezó hace dos temporadas en el Ebro, pasó luego por el Ejea y esta temporada regresó al conjunto de la capital maña; con los tres disputó el play off de ascenso a Segunda B, cayendo en las dos primeras tentativas a las primeras de cambio ante el Compostela y el Atlético Malagueño, y logrando hace apenas unos días el salto a la categoría de bronce tras apear al Varea riojano (1-0 y 2-2). El exblanquiverde, que tiene encima de la mesa una oferta de renovación, está asentado en Zaragoza desde que colgó las botas en 2006 tras una extensa carrera, donde conoció a su pareja y tiene a sus hijos. Allí fue entrenador de las categorías inferiores del Molinense -el mismo club en el que colgó las botas- y el Valdefierro, y formó parte del cuerpo técnico del Balsas Picarral como secretario técnico antes de cumplir su sueño de llegar a los banquillos como entrenador profesional.

Ahora Loreto está ante su gran oportunidad. Emilio Vega lo quiere para liderar el nuevo proyecto, lo que supondría su regreso a un club del que salió en verano de 1999 tras el ascenso en Cartagonova. Una vuelta que estuvo a punto de producirse en 2006 para pasar a formar parte de la secretaría técnica para la que finalmente el elegido fue el que ahora es su valedor. Pero aún queda la prueba final: convencer a Carlos González, que prefiere un perfil más experimentado para este proyecto después de haber convertido precisamente al equipo en un trampolín para jóvenes entrenadores desde su llegada al cargo. Las miras del presidente van más hacia Quique Setién, que decidirá su futuro a partir del lunes, cuando finalice su temporada con el Lugo y que ya ha reconocido que cuenta también con una oferta del Numancia. En la recámara está también Luis César Sampedro, que parece decidido a romper su compromiso con el Albacete un año antes de que expire y busca un proyecto mucho más ambicioso que el manchego. En un tercer escalón se encuentran muchos de los nombres que aparecieron en las primeras quinielas y que, según advirtió el dirigente en la puesta de largo de Emilio, quedaron aparcadas hace varias semanas.

Quizás la postura de González pueda cambiar en el encuentro con Loreto previsto para la próxima semana. Ese cara a cara debe resultar clave para que el sevillano le muestre su ambición por liderar este proyecto, algo muy del gusto del mandatario. De una u otra forma, lo que sí parece claro es que hasta que no pase el fin de semana no se conocerá el nombre del nuevo inquilino del Córdoba. Habrá que ver si con Emilio Vega teniendo voz y voto en esta primera gran decisión de la temporada.