Kike Mateo, en la agendaSalva Sevilla sólo quiere "jugar en el Betis"
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El CCF se interesa por el mediapunta murciano · Acabado su contrato con el Sporting, media Segunda ha preguntado por élEl jugador obvia cualquier acuerdo con el Córdoba indicando que "de eso no sé nada; lo lleva mi agente"
Kike Mateo, un antiguo objeto del deseo del Córdoba durante los últimos años, vuelve a estar en la agenda de la dirección deportiva blanquiverde. El jugador murciano, que ha militado las tres últimas temporadas en el Sporting de Gijón, ha finalizado su compromiso con los asturianos y queda libre, por lo que se ha convertido en una pieza apetecible para el mercado de Segunda División, aunque como es habitual, no le faltan pretendientes. Y el Córdoba es sólo uno más en la lista.
Enrique Mateo Montoya cumplirá el próximo 30 de diciembre 31 años tras una carrera siempre de menos a más, ascendiendo desde los escalones más humildes del fútbol hasta jugar en Primera División. Mediapunta de 1.80, dio sus primeros pasos en equipos como el Pinatar, Bullense y Orihuela hasta ascender con el Ciudad de Murcia a Segunda B. Mallorca B (01-02), de nuevo Orihuela (02-03) y Lorca (03-04, con ascenso a Segunda B) fueron sus siguientes escalas antes de asentarse como jugador de Segunda en el Eibar (04-05) y Hércules (05-07). En verano de 2007 firmó con el Sporting de Gijón, logrando el ascenso a Primera División como máximo goleador del cuadro astur gracias a sus 12 tantos. En la máxima categoría, jugó 24 partidos en el curso 08-09 con escaso protagonismo, aunque tuvo tiempo para hacer dos goles en escenarios de fuste, ante el Real Madrid en el Bernabéu y frente al Barcelona en el Camp Nou. En esta pasada campaña su contribución bajó hasta los 16 partidos jugados con sólo 440 minutos.
Pese a que la grada de El Molinón le venera como uno de los mayores símbolos del equipo, Kike Mateo se ha quedado sin sitio en la plantilla de Primera y ha entrado en el mercado. El murciano está en las agendas de "casi todos los equipos de Segunda", como su propio representante, Francisco Sabater Sánchez, reconoció esta semana en La Nueva España, "pero en estos momentos únicamente barajamos la posibilidad de dos o tres. Tanto por su nivel deportivo como por ser de los pocos que podrían hacer frente a sus pretensiones económicas".
Y ahí puede estar el Córdoba, aunque las oficinas de El Arcángel pelean con otras ofertas tan potentes como las del Cartagena -la que más puntos tiene a favor-, Celta, Rayo Vallecano o Ponferradina. Después de seis años fuera de casa, Kike Mateo podría sopesar la opción de volver a Murcia para enrolarse en el Efesé, que de nuevo trata de armar un equipo para asaltar el ascenso que tan cerca tuvo este curso y quiere a mediapunta como sustituto de De Lucas. El Celta, con el que ya coqueteó en el pasado mercado invernal, vuelve a llamar a su puerta, aunque el acuerdo parece más lejano. El Rayo también le ha tenido siempre en su agenda, mientras que la Ponferradina pretende pescar en los descartes de Mareo, con Mateo en una lista en la que también se encuentran el ex cordobesista Bilic, Barral, Jorge, Pedro, Landeira o Carlinos. Su limitado presupuesto para fichajes parece descartar al cuadro del Bierzo de la puja, aunque el Córdoba tampoco parece muy boyante.
Para colmo, y ante un panorama que económicamente viene marcado por la recesión en los clubes de Segunda, el jugador no ve con malos ojos emprender una aventura en el fútbol extranjero. La prensa asturiana apunta que esta misma semana habrá una reunión entre el futbolista y su representante para estudiar ofertas de la Primera División griega y turca, "pero eso sí, tendría que cobrar bastante más de lo que ha percibido en España", avisa el agente.
En todo caso, el jugador no tomará una decisión en breve, sino que sopesará bien todas las opciones. El Córdoba presentará como avales su proyecto deportivo en crecimiento y una cierta estabilidad económica dentro de la prudencia. El problema es que, como está siendo habitual, el CCF tendrá que competir con otros clubes por la misma pieza en una subasta en la que el dinero manda, y ahora mismo al club de El Arcángel no le sobra ni un euro.
Que Salva Sevilla se la ha jugado al Córdoba es algo que cada día está más claro. El modo, por duro que sea asumirlo para la entidad blanquiverde, es lo de menos. El bucle Levante-Betis para que el centrocampista almeriense acabe jugando en el Ruiz de Lopera ha burlado el preacuerdo firmado por un CCF que ahora se siente herido en su orgullo. Pero por encima de todo ha estado el deseo del propio jugador, que ha preferido arriesgarse con tal de vestir de verdiblanco la próxima temporada en lugar de blanquiverde, que como decía la campaña previa al derbi andaluz, no es lo mismo.
"Lo único que sé es dónde quiero jugar y lo que me ilusiona poder estar en el Betis", reconoció ayer el jugador en la edición sevillana de ABC, dejando en papel mojado su compromiso con el Córdoba y, por supuesto, cualquier interés en jugar la próxima temporada en El Arcángel. Una fortísima oferta económica ha sido suficiente para que el futbolista y su agente encuentren la forma de romper la vinculación con el CCF, aunque Salva Sevilla lo aliña diciendo que "me ilusiona jugar en un equipo tan importante y con una gran afición".
El caso es que el jugador reconoce que, incluso después de comprometerse con el Córdoba, "otros equipos de Segunda y Primera preguntaron por mí, pero cuando escuché al Betis rechacé lo demás", sin hacer mención a lo firmado con el club blanquiverde... ni al pequeño detalle de que, como puente, tendrá que firmar con el Levante, que le reconoce como jugador suyo a todos los efectos.
En Sevilla le esperan con los brazos abiertos. El Betis cuenta con él como uno de los primeros fichajes, junto a Momo y al pichichi Jorge Molina, y Salva no niega que "tengo que aprovechar esta oportunidad para triunfar en el Betis". Del Córdoba, ni hablar. "De esos acuerdos no sé nada. Todo lo lleva mi representante", dice Salva, mientras que en El Arcángel tratan de buscar la vía jurídica para cobrar su compensación económica, por la que luchará "hasta el último extremo", como indicó Antonio Prieto.
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