Julia Figueroa tuvo un paso efímero por el Grand Slam de Astana (Kazajistán), una prueba que para la cordobesa cobraba especial relevancia porque se trataba de su regreso a los tatamis internacionales después de una larga convalecencia de seis meses producida por una lesión. La cordobesa no pudo conseguir un resultado satisfactoria pero sí tuvo la ocasión de recuperar sensaciones para ir poco a poco volviendo al excelente nivel que venía mostrando antes de verse obligada a parar.

En Astana, Julia Figueroa se las vio dentro de la categoría de -48 kilogramos con la rusa Kristina Dudina, una rival bastante dura que se llevó la victoria ante la cordobesa en una pugna muy cerrada. Prueba de la competitividad de Dudina es que finalmente terminó alzándose con una medalla de bronce en este Grand Slam.

Pese a no haber conseguido el resultado esperado, el simple regreso a los tatamis ya era una prueba de fuego para una Julia Figueroa que, una vez olvidada su grave lesión, tratará ahora de recuperar las mejores sensaciones para ir sumando buenos resultados. Y es que la cordobesa se encuentra inmersa en la pelea por conseguir una plaza en los Juegos Olímpicos de París 2024, para lo que tendrá que mantenenerse entre las 17 mejores luchadoras de su peso, teniendo en cuenta que cada país solo podrá presentar una judoca por categoría y que Francia cuenta con una plaza garantizada en cada peso como país organizador.

En la actualidad Julia Figueroa es la española mejor clasificada en un ranking olímpico que estará activo hasta el 22 de junio de 2024. Para seguir progresando en ese listado, en el que figura en el puesto 13, la cordobesa tiene una nueva oportunidad la próxima semana con el Grand Slam de Ulaanbaatar (Mongolia).