Tiro Olímpico
  • El joven tirador cordobés acumula éxitos con la selección española en categoría júnior y apunta a un futuro brillante con el sueño de alcanzar unos Juegos

Juan Antonio García, el belmezano que asoma en la élite del tiro olímpico

Juan Antonio García, segundo por la derecha, junto al equipo español de tiro olímpico. Juan Antonio García, segundo por la derecha, junto al equipo español de tiro olímpico.

Juan Antonio García, segundo por la derecha, junto al equipo español de tiro olímpico. / RFEDETO

Escrito por

· Rafael Cano

Redactor

Mientras la baenense Fátima Gálvez atraviesa por la etapa más brillante de su dilatada trayectoria profesional, con el billete para los cuartos Juegos Olímpicos de su carrera en el bolsillo, el tiro olímpico español está gestando poco a poco a una nueva promesa internacional con acento cordobés. Se trata de Juan Antonio García, un belmezano que a sus 19 años es una de los talentos incipientes más consolidados de su deporte, como miembro de una generación con mucho talento que pisa fuerte en categoría júnior y mira ya a los Juegos de Los Ángeles 2028 como un objetivo real para ellos.

A finales del mes de septiembre, Juan Antonio García se colgó su quinta medalla internacional como miembro del equipo español júnior de tiro olímpico. Fue en el Mundial celebrado en Osijek (Croacia). El joven natural de Belmez, nacido en 2003, se subió al podio de foso olímpico mixto junto a Paula Morcillo tras conquistar un brillante bronce.

Antes, ya venía de sumar en el Campeonato de Europa el oro por equipos, una competición en la que García y sus compañeros también ganaron en la Copa del Mundo. El de Osijek era su segundo Mundial, pues un año antes ya había apuntado alto en Lima (Perú) con el bronce en la competición individual y el oro por equipos mixtos junto a Mar Molné.

Un bagaje, pese a su juventud, muy a tener en cuenta para un chico que, como él mismo cuenta en conversación con el Día de Córdoba, empezó a tirar por tradición familiar, junto a su padre y su abuelo: "En mi familia cazaban, pero tirar al plato no tiraban. Un día fuimos a una tirada, probé y vieron que tiraba bien. Un hombre que tiraba me invitó a ir un día con él y ahí empecé a hacerlo con más regularidad".

Juan Antonio García, en su última competición, el Mundial de Osijek (Croacia). Juan Antonio García, en su última competición, el Mundial de Osijek (Croacia).

Juan Antonio García, en su última competición, el Mundial de Osijek (Croacia). / ISSF

A los 14 años, Juan Antonio pudo conseguir su primer permiso de armas y su contacto con el tiro creció entonces de manera exponencial. "Es un deporte que desde el primer día me enganchó. Supongo que dependerá también mucho de cada familia, en mi caso era una cosa familiar el convivir con la caza y para mí también es una forma de compartir una actividad con mi abuelo", cuenta el belmezano.

Lo que empezó siendo una afición compartida con su familia, pasó a ser algo más serio pronto. "Me di cuenta que podía competir cuando empecé a salir a campeonatos de España. Empecé a competir federado y cada vez salía a más campeonatos, hasta que gané alguno y vi que tenía un buen nivel", cuando el tirador cordobés.

Su salto a la selección júnior

En 2020, Juan Antonio García entró a formar parte del equipo español júnior de foso olímpico, aunque antes de que las primeras competiciones llegasen, el coronavirus paralizó toda actividad. Fue un año después, en 2021, cuando empezó a mostrar su talento para la escopeta más allá de las fronteras españolas. Y el resultado fue tan satisfactorio que este joven de Belmez decidió apostar fuerte por el tiro.

Actualmente, tras acabar sus estudios de bachillerato, García se prepara para formar parte del ejército español, en un empleo en el que encontrará buenas perspectivas para compatibilizar su pasión por la escopeta. "Compagino la academia con los entrenamientos y con echarle una mano a mi abuelo", cuenta sobre sus próximos pasos a dar. Para entrenar, las trabas no son pocas. Suele hacer dos o tres veces en semana, pero para ello se tiene que desplazar: "En Belmez no hay campo de tiro y tengo que ir a los campos de Baena o La Carlota, o también el de Granada". Esa escasez de instalaciones le lleva también a competir en España bajo la Federación Extremeña, por pura cercanía con su lugar de residencia.

Fátima Gálvez y Alberto Fernández, sus referentes

Para un joven de 19 años al que le apasiona el tiro, es fácil tener en la actualidad como espejos en los que mirarse a los campeones olímpicos Fátima Gálvez y Alberto Fernández. "Ellos son los grandes referentes. Cuando yo empecé a tirar, era de ellos de los que yo escuchaba hablar en los campos de tiro. Al final, quieras o no, te fijas en ellos", reconoce Juan Antonio García, que además ha podido comprobar de primera mano el talante de la baenense y el madrileño. "Son muy cercanos con los jóvenes y nos ayudan. Nosotros tenemos a los entrenadores de la federación, pero ellos están ahí y nos aconsejan", añade.

Con la temporada internacional finalizada tras el Mundial de Croacia, el tirador cordobés ya mira al año que viene, el que será su último curso en la categoría júnior. "Ahora lo importante es hacer buenos resultados en las dos tiradas que quedan este año, en Granada y Toledo, para estar el año que viene en el Campeonato de Europa", cuenta. En 2023, los campeonatos de Europa y el Mundo, junto a las pruebas de la Copa del Mundo, volverán a centrar todo su interés.

Su reto es el de mantenerse en la élite para pensar en un paso exitoso a la categoría sénior. "Ese es el objetivo, pasar a sénior y competir con los grandes para conseguir una plaza olímpica, que es lo máximo a lo que podemos aspirar en nuestro deporte", confiesa.

Esa cita olímpica no será tanto París 2024, que por generación les cogerá tanto a él como sus compañeros demasiado pronto, sino Los Ángeles 2028. "Los tiradores que estamos ahora mismo en júnior miramos a esos Juegos, porque los de París nos pillan demasiado cerca. Pero sí, estar en unos Juegos es lo máximo, el sueño que tenemos todos", reitera. Paso a paso, Juan Antonio García confía en que el tiro olímpico español siga dando alegrías al país y que lo haga, como ahora con Fátima Gálvez, con marcado acento cordobés.

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