El Itea Córdoba puso fin a la dinámica positiva de su máximo adversario, el Deza CBM, con una merecida victoria en el segundo derbi de la División de Honor Plata. Las fuensantinas impusieron en la pista la diferencia que se refleja en la tabla con un inicio arrollador del que no fueron capaces de sobreponerse las de Mario Ortiz, que siempre fueron a remolque en el encuentro. Eso sí, a pesar de la derrota, las granates sellaron la permanencia en la categoría.

Con una Bonazzola imperial en la anotación, las locales se distanciaron rápidamente en el marcador con un parcial de cinco goles de diferencia a los 10 minutos (7-2). La exigencia que marcó el Itea en los primeros compases obligó a reaccionar a las granates que fueron ligeramente superiores en los siguientes parciales reduciendo la distancia hasta tres (11-8) a falta de diez para el descanso. Sin embargo, un nuevo acelerón de las de Rafa Moreno -sancionado en el encuentro- hizo que se llegase al intermedio, de nuevo con la distancia de cinco (15-10).

Tras la reanudación, mismo guion. Las locales volvieron a ser una apisonadora y coger distancia en el electrónico. Esta vez fue Ángela Ruiz la que tiró del carro de las verdes, que terminó con ocho tantos. En el Deza CBM apareció la figura de Ariadna Vázquez para liderar una remontada que se antojaba imposible.

En poco más de dos minutos, las granates redujeron la distancia de 24-19 a 24-22 y con seis minutos por delante. Ahí volvieron a emerger la figura de Bonazzola y de Ángela Ruiz para recuperar la ventaja perdida y dejar sentenciado un encuentro disputado, aunque cómodo para las fuensantinas que siempre fueron por encima. Sin opciones, las de Mario Ortiz maquillaron el resultado con un último tanto que situó el 28-25 en el pabellón de La Fuensanta.