La FAF busca otro giro

Crear una categoría entre la Liga Adelante y la Segunda B, fijar un tope salarial y ampliar a diez el fijo de sub 23 en las plantillas de la división de bronce. Ésas son las medidas que adoptó ayer la comisión de clubes que han militado la pasada campaña en la Segunda División B, formada por Cádiz, Linense, Lucena, Granada y Antequera, en la reunión mantenida en la sede de la Federación Andaluza. La FAF ha preparado un proyecto de remodelación de las categorías amateurs del fútbol nacional que presentará a la Asamblea General de la RFEF. El proyecto, que lleva elaborándose varios meses, no sería aprobado hasta el curso 09-10.

La Andaluza solicita la creación de una división (categoría A, porque sería la primera tras las dos que componen la LFP) con un grupo único, inmediatamente por detrás de la Liga Adelante, desbancando a la actual Segunda B. Esa categoría la compondrían los cuatro conjuntos que desciendan de la Liga Adelante y los 12 que no lograsen el ascenso a la división de plata tras disputar la liguilla.

Como cuarta categoría nacional (categoría B) se crearía una competición con seis grupos de 12 equipos cada uno, reunidos por proximidad geográfica. En la segunda fase, partiendo de cero en puntuación, los seis primeros clasificados pelearían por el ascenso y los seis restantes defenderían su permanencia en la división. Esa cuarta categoría la formarían los 18 clubes que ascienden desde Tercera y los 54 mejores de la de la Segunda B que no hayan logrado el ascenso a la categoría A.

Lo que ahora se entiende como Tercera, es decir, la que pasaría a ser la quinta división (en adelante C) quedaría dividida en 36 grupos de 12 equipos unidos también por proximidad geográfica. La segunda fase tendría un sistema muy similar a la de la categoría B.

El proyecto que maneja la FAF prevé también establecer un sueldo mínimo y un tope salarial para los jugadores y que diez de los componentes de las plantillas tengan la condición de sub 23.