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Djokovic se ve obligado a guardar un mes de reposo

  • La rotura fibrilar, a falta de una resonancia, deja al serbio parado durante 4 semanas

Lo que casi ningún rival fue capaz de lograr este año, frenar a Novak Djokovic, lo logró el cuerpo del serbio, que estará al menos un mes fuera del circuito tras la lesión sufrida el domingo en las semifinales de la Copa Davis.

"Todo indica que serán cuatro semanas, pero para estar seguros debemos esperar a una resonancia magnética que realizaremos el jueves", dijo ayer Edoardo Artaldi, portavoz del jugador. "Tiene una rotura parcial de las fibras musculares y una hemorragia interna", añadió Artaldi.

Pero Djokovic mostró optimismo, porque aseguró a la agencia serbia Tanjug que la lesión "no es tan grave como parecía inicialmente".

Si se aleja del circuito durante cuatro semanas, el serbio no estará en el torneo de Pekín, a partir del 3 de octubre, ni en el Masters 1000 de Shanghai, a partir del 9. "Espero recuperarme para entonces, pero, en todo caso, no quiero arriesgarme a agravar la lesión, y ahora es muy difícil decir cuánto tiempo tendré que descansar", añadió Djokovic.

El serbio sufrió la lesión en el partido que perdió por abandono ante el argentino Juan Martín del Potro cuando caía 7-6 (7-5) y 3-0 en Belgrado por las semifinales de la Davis, victoria que le dio a los sudamericanos el pase a la final ante España.

La lesión, de todos modos, será de consecuencias muy limitadas para Djokovic, ya que, suceda lo que suceda desde ahora y hasta fin de temporada, el serbio de 24 años tiene ya asegurado el número uno del ranking mundial.

Djokovic está protagonizando una de las mejores temporadas de la historia, con 64 victorias y apenas tres derrotas, además de diez torneos conquistados, entre ellos tres de los cuatro del Grand Slam.

Héroe nacional en su país, que no olvida su decisivo aporte de 2010 para conquistar la Davis por primera vez en la historia serbia, Djokovic estaba tras el US Open ante un dilema: su físico le decía que parase, pero se impuso el deseo del serbio de jugar la Davis, de no fallarle a su gente. No pudo, pero su imagen en Serbia está intacta, porque nadie le puede decir que no lo intentó.

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