El Ángel Ximénez deberá remontar seis goles en el encuentro de vuelta de la tercera eliminatoria de la Copa del Rey del próximo martes en el Alcalde Miguel Salas tras ceder ayer con claridad ante el Bidasoa Irún en Artaleku por 32-26. Los irundarras llevaron la voz cantante desde primera hora y a los diez minutos de juego ya llevaban cuatro goles de ventaja respecto al cuadro pontanense, que le costó entrar mucho en juego. Los locales, después de su mal juego ante los equipos de la zona baja en la Liga Asobal, retomó parte de su esencia en este partido que dominó desde el pitido inicial gracias al acierto en la portería de Dejanovic, que llevaba un 70 por ciento de acierto al minuto 15. Además, los de Puente Genil vivían casi en exclusiva del brazo de Josic, aunque mejoraron mediada la primera parte. De hecho, se fueron al descanso sólo dos goles por debajo, lo que dejaba abierto el encuentro para la reanudación.

Tras el paso por los vestuarios, el conjunto de Quino Soler mantuvo bien el tipo en el tramo inicial. Sin embargo, los guipuzcoanos tiraron de cantera y Azkue y el extremo Cavero, con un pleno de efectividad al igual que Serrano, dieron a su equipo una ventaja de cinco goles que supieron gestionar en los contados arreones de su rival. A ello se unió que Pejanovic lo paraba casi todo y el ataque se sumó a la fiesta amarilla en Artaleku, ya que funcionó de maravilla la línea de pivote, por lo que los locales tomaron una renta cómoda que les sirvió para vivir un final tranquilo y meter así en aprietos a los pontanenses para poder pasar la eliminatoria copera.