El Celta viaja a Rusia con una mínima ventaja

Un gol de Claudio Beauvue en el último minuto permitirá al Celta de Vigo defender en Rusia una ventaja de un gol después de derrotar (2-1) al Krasnodar, en un partido en el que el conjunto gallego dominó con claridad en el primer tiempo, pero en el que la victoria, tras su falta de pegada en ataque, peligró durante la segunda mitad.

Reaccionó el Celta con firmeza tras el golpe que recibió el fin de semana ante el Barcelona (5-0) en el Camp Nou. Fue el equipo atrevido, dominador y descarado que acostumbra y que desea Berizzo, quien situó en la banda izquierda al joven Pione Sisto. Fue un acierto. El danés volvió loco con sus carreras al lateral Martynovich.

Por el extremo izquierdo llegaron las mejores ocasiones de los celestes en un primer tiempo en el que rozaron la perfección. De cada arranque de Sisto nació una ocasión y casi siempre con el sueco John Guidetti como finalizador. Sólo le faltó acertar porque dispuso de tres ocasiones muy claras.

El Celta se sintió muy superior pero le faltaba golpear. Antes del descanso Sisto, tras una gran jugada personal, y Aspas, con un tiro lejano desde la frontal, volvieron a rozar el gol. El premio llegó a los cuatro minutos de la segunda mitad: Wass, con un potente disparo de falta directa, superó a Kritsyuk, al que Guidetti molestó con su gesto de golpear el balón (49').

Pero el equipo vigués cometió un grave error. En vez de tranquilizar el juego y de obligar al Krasnodar a estirarse, permitió que el choque fuese de ida y vuelta, de ataques alocados y poco control en el centro del campo. Y lo pagó. Claesson, tras un gran gesto técnico, superó a Sergio Álvarez (55').

Volvió, en los minutos finales, a tener la pelota el Celta, guiado por Jozabed. Y en el minuto 90, en un centro de Hugo Mallo, llegó ese cabezazo impecable de Beauvue.