El Ángel Ximénez superó al Atlético Valladolid en un partido difícil y complicado donde los pontanenses tuvieron que sacar su mejor versión desde la defensa para que el triunfo se quedara en casa. El duelo comenzó parejo conforme al guion que se preveía, con equilibrio en el marcador y rápido intercambio de goles. Con el 4-4, los locales se sobrepusieron a la exclusión de Buzle y empezaron a mejorar en tareas defensivas, lo que se tradujo en ventajas más amplias . Pomeranz situó el 8-6 aprovechando la exclusión Rosell y poco después, pasado el ecuador, Ribeiro establecía el 9-6 que obligaba a Pisonero a parar el partido.

Los pucelanos recurrieron sin demasiado éxito a los ataques de siete contra seis, topándose con las buenas intervenciones de un Álvaro de Hita que se convirtió en un baluarte para los suyos. El Ángel Ximénez se disparó hasta los cuatro goles de ventaja con tantos de Cuenca y una delicatessen de Túa por el extremo, pero en el tramo final Valladolid reaccionó con una buena defensa y la efectividad de Freitas, permitiendo a los de Pisonero recuperar el terreno perdido, reducir la diferencia y llegar al descanso un gol abajo (13-12).

Tras el descanso, el partido siguió los mismos derroteros de igualdad. Dos goles consecutivos de Javi Muñoz y otro de Buzle dieron cierta tranquilidad al equipo pontanés, dejando un 17-14 que, de nuevo, motivó que Pisonero entregar su tarjeta de tiempo muerto en la mesa. El intercambio de goles favorecía a los de Puente Genil, muy sólidos atrás, aunque el conjunto pucelano tambien respondía con mucha intensidad y firmeza defensiva manteniéndose con opciones gracias a los goles del pivote Álvaro Martínez.

El encuentro se tornaba en frenético. Bustos dio una pausa con el 22-21, pero la exclusión de Arsenashvili facilitó la igualada de Camino. Quedaban diez minutos. Lamariano crecía en la portería visitante y el balón quemaba. Ribeiro puso el 23-22, y tras una gran defensa local, Javi García el 24-22. Dimitrievski recortó la desventaja, pero Túa situó el 25-23 a falta de tres minutos y medio, y poco después, Luisfe el 26-23 que prácticamente sentenciaba el duelo. Al final 28-25 y dos puntos muy importantes que se quedan en tierras pontanenses ante un rival directo por la permanencia.