El Ángel Ximénez acaricia la permanencia matemática una temporada más en la Liga Asobal, tras superar a Anaitasuna (33-32) en un duelo intenso, disputado y de alternativas en el marcador que hizo vibrar a los aficionados que acudieron al Alcalde Miguel Salas en la matinal del Domingo de Ramos.

El partido comenzó con los dos equipos optando por ataques pacientes y elaborados, aunque, poco a poco, las imprecisiones locales y la intensidad de la defensa navarra hizo que el cuadro visitante tomara una renta de cuatro goles (2-6). Sin embargo, el Ángel Ximénez reaccionó rápido, ajustando mejor atrás y recortando la desventaja con goles de Ribeiro, Cuenca y Javi García (6-8). Nordlander empezó a carburar en portería y Ribeiro, transformando un siete metros, igualó el choque (9-9) pasado el ecuador del primer acto.

Los de Puente Genil estaban más intensos y enchufados. Túa adelantó al equipo con dos tantos consecutivos estableciendo un favorable 11-9, culminando así un parcial de 8-4 que confirmaba la buena inercia pontana. Anaitasuna acusó las exclusiones de Aitor García y Chocarro, y el Ximénez lo aprovechó llegando a situarse 13-10 con un gol de David Estepa, circunstancia que obligó a Quique Domínguez a solicitar tiempo muerto.

La exclusión de Marcio da Silva dio un poco de aire a los navarros, que encontraron a Bazán en el pivote, pero fue un espejismo, ya que los de Puente Genil, con un inspiradísimo Nordlander, empezaron a gustarse en ataque. Javi Muñoz puso una máxima ventaja local de cuatro goles con el 18-14, pero Xavi Castro y Pereira tomaron las riendas del ataque pamplonés para reducir la brecha y llegar al descanso 19-17.

Tras el descanso, el partido mantuvo la dinámica de intercambio de goles, aunque Nordlander y Bar detuvieron un par de siete metros. Pese a ello, Anaitasuna, con más intensidad atrás y eficacia goleadora, empezó a imponerse y le dio la vuelta al duelo con goles de Fernández, Castro, Bazán y Elustondo, poniéndose 20-22. El encuentro no tenía margen de error, y el Ximénez recobró la compostura con tantos de Pomeranz, Túa y Arsenashvili para volver a tomar la delantera (24-23).

Domínguez no lo veía claro y paró nuevamente el duelo con 25-23 en contra tras un golazo de astucia y poderío físico de Xavi Túa. El extremo se gustaba y ello, sumado a una doble parada de Álvaro de Hita, relanzó al equipo que, con un 7-1 de parcial, se puso 27-23. Con el manchego inexpugnable atrás, los de Bustos administraron la ventaja de cuatro goles hasta entrar en la recta final. Sin embargo, los navarros no habían dicho su última palabra y con un Ganuza acertadísimo volvieron a acercarse peligrosamente (29-27). Xavi Castro puso a los navarros a uno, pero Buzle dio oxígeno a los pontanenses anotando en los siguientes ataques.

La tensión se mascaba. Meoki situó el 32-31 a falta de cuatro minutos y Redondo empató acto seguido. El Ximénez malgastaba sus ataques, pero la exclusión de Ganuza daba superioridad a los pontaneses. Javi García marcó antes de entrar en el último minuto, antes de la falta en ataque de Meoki que puso en bandeja el triunfo de los de Puente Genil en un último ataque que los de Bustos supieron gestionar para amarrar los dos puntos.