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El Alcoraz queda atrás

  • En progresión Un bello gol de Patiño, tras una acción combinada, da al Córdoba una valiosa victoria en un campo en el que nunca había ganado Sigue dentro Los de Paco permanecen en la zona de 'play off'

Otra jugada combinativa, otro golazo, tres puntos más. El Córdoba derribó el muro de El Alcoraz con su quinta victoria consecutiva entre Copa y Liga y se asienta en la zona de play off de ascenso a Primera División, un desafío que definitivamente emerge en el horizonte. Patiño, a centro de López Silva, marcó a diez minutos del final el gol de otro triunfo por la mínima, otra muesca en el revólver de Paco Jémez. Y no puede decirse que no fuera merecido, porque el equipo minimizó las virtudes de un Huesca amparado en su poderío físico. El cordobesismo ya puede ir pensando en el duelo en casa con el Villarreal B, que cerrará la octava jornada el próximo domingo a las diez de la noche, con toda la ilusión del mundo.

Paco no pudo repetir once por primera vez debido a la lesión de Borja García en el entrenamiento previo al partido. Como cabía esperar, Quero ocupó la vacante en la alineación, aunque con un matiz significativo; salió como interior izquierdo, con López Silva en la derecha. Asimismo, López Garai volvió a compartir el doble pivote con Javi Hervás a pesar del regreso a la convocatoria de Alberto Aguilar. El resto eran los mismos que habían dado continuidad a la magnífica racha victoriosa de un equipo que se plantaba en el escenario del ascenso de 2007 con el propósito de ratificar todas las loas amasadas por su excepcional arranque.

El Córdoba mandó desde el principio, asumiendo la posesión pero tocando lejos de los dominios de Cabrero; el Huesca salió a verlas venir, sin presionar arriba. Sin embargo, el peligro del juego aéreo azulgrana quedó patente en su primer córner: con los once blanquiverdes metidos en su área, Camacho remató solo en el segundo palo. La volea se estrelló en la maraña.

El conjunto aragonés, atenazado por sus escasos cuatro puntos y los seis goles encajados como local (0-3 ante el Alcorcón y 3-3 con el Alcoyano), atacaba con más empuje que ideas. Sin apenas elaborar: patadón y tentetieso o poderosos saques de banda en pos de la segunda jugada. El CCF sí trataba de trenzar, ensanchando el campo, y de vez en cuando sorprendía con balones en largo a la espalda de la zaga. En uno de ellos, con Charles presto para morder, Rafel Sastre cabeceó un metro por encima de su portería. En el siguiente acercamiento, conducido por el brasileño, López Silva testó a Cabrero con un disparo angulado.

El Huesca seguía a lo suyo, insistiendo con el juego directo. Así, un centro de Sorribas se envenenó hasta botar sobre el larguero. Al Córdoba no le funcionaban los escarceos de Quero, que encarando a pie cambiado metió varios centros, forzó bastantes saques de esquina sin consecuencias y dejó amonestado a su marcador, el mayor de los hermanos Sastre. El cuadro local, más convencido que al principio, explotó alguna que otra desaplicación visitante, aunque sin pegada. En una colada por la derecha de Camacho, Gilvan Gomes no acertó a engatillar. El mediapunta también sacó de su sitio a Tena para propiciar una amarilla evitable.

López Garai y Javi Hervás descongestionaban con solvencia, pero faltaba profundidad. En buena medida, por las precauciones de un adversario con muchos hombres por detrás del balón. No obstante, el equipo alcanzó el descanso con las sensaciones positivas del inicio, sintiéndose superior a un oponente acomplejado.

Y regresó de la misma manera. Como en Las Palmas, Patiño gozó de una gran ocasión en el primer minuto de la reanudación: tras ganar un balón dividido a los centrales y perfilarse en la frontal, lanzó ajustado al poste con Quero entrando desmarcado a su izquierda. Luego fue Charles el que tiró en semifallo tras un pase atrás del propio Quero, esta vez desde la derecha.

Aliviado por la ceguera de Miranda Torres y su asistente, que pasaron por alto una mano de Luis Helguera dentro del área, Ángel Royo cambió hombre por hombre en la punta de lanza: Tariq por Roberto. El Huesca necesitaba salida con un referente arriba porque estaba encerrado, aunque estuvo a punto de marcar en un latigazo de Camacho desde la medular. Como pretende Jémez, parecía que el Córdoba jugaba en casa. La diferencia en el trato a la pelota era flagrante.

Sin embargo, el bando oscense podía hacer daño por la vía rápida. Un simple pelotazo, indecisión en el repliegue y oportunidad al canto: Gilvan ganó la línea de fondo y Sorribas no encontró la escuadra por poco. A Charles también se le fue un chut por centímetros. Con el encuentro de ida y vuelta porque la salida de Tariq había equilibrado las fuerzas, López Silva desperdició un golpe franco junto al pico del área.

Javi Martínez renovó la banda derecha del anfitrión reemplazando a Lluís Sastre y Fuentes pidió el cambio por unas molestias musculares; entró Fernández, que debutaba en la Liga, y Cerra pasó a la izquierda. La transformación del costado siniestro fue absoluta con 20 minutos por delante, cuando Fede Vico reemplazó a Quero. Frescura para un tramo final al que el equipo llegó algo espeso, con síntomas de fatiga.

Javi Hervás tiraba del carro y Patiño seguía mostrándose entre líneas y dando bocados en la presión. El escaparate profesional no les viene grande, ni mucho menos. Es lo que quiere demostrar Fede, que habilitó a Cerra con una apertura desaprovechada por un centro pésimo. A Paco, cordobés de pro nacido en Gran Canaria, le dio mucho coraje. Suerte -hay que buscarla- que la siguiente ofensiva, idéntica mas por el carril diestro, sí cuajó: Charles lo cocinó, López Silva le echó sal y Patiño, con un testarazo espectacular, se lo comió. Corría el minuto 80 de partido.

El voraz punta madrileño hizo otra notable contribución a la causa antes de ser suplido por Alberto Aguilar: cabalgada y segunda tarjeta a Rafel Sastre. Con el de Benamejí sobre el césped, el CCF acabó con un 4-2-3-1 y tuvo la sentencia en una vaselina de López Silva que, levemente desviada por Cabrero, se topó con el travesaño. Fue una bella acción que elevó aún más la pasión en los ánimos de los seguidores cordobesistas en la grada de El Alcoraz. Un par de faltas de Fernández en su pugna con Jokin Esparza, la última bala de Royo, comprometieron a un bloque que resistió el asedio para seguir soñando con algo grande. Muy grande.

Árbitro: Miranda Torres (catalán). No estuvo del todo fino. Obvió un penalti por mano de Luis Helguera en el minuto 51.

Tarjetas: Amarillas Patiño (23'), Tena (37'), Camacho (57'), Gaspar (64') y Josetxo (76'). Roja Rafel Sastre (33' y 84').

Gol 0-1 (80') Patiño. Charles conduce por el centro y abre hacia la derecha, López Silva centra y Patiño, anticipándose a Luis Helguera en el primer palo, marca con un cabezazo cruzado.

Incidencias: Partido correspondiente a la séptima jornada de la Liga Adelante disputado en El Alcoraz ante unos 2.500 espectadores.

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