Los sub 23, el salto de calidad que buscaba el Córdoba CF

Una de las gratas sorpresas que está dejando la pretemporada del Córdoba CF es la categoría que están mostrando sus futbolistas sub 23. Los jóvenes, en su mayoría incorporados este verano al club, marcan una línea ascendente y pelean de tú a tú con sus compañeros por el puesto de titular, demostrando que el conjunto blanquiverde cuenta con una plantilla en la que cualquier puede partir de inicio. Los goles de Casas, la velocidad de Simo, la profundidad de Meléndez y Puga, la calidad de Viedma o la templanza en defensa de Visus son estupendas noticias para Germán Crespo, que se ha encontrado con una gran respuesta de estos futbolistas ante la oportunidad de mostrarse que el técnico les ha otorgado este verano.

Dentro de los muchos errores que el Córdoba detectó en la construcción de su plantilla el curso pasado, la escasa aportación de los jugadores jóvenes fue uno de los más flagrantes. Con un plantel lleno de veteranos llamados a tirar del carro, los futbolistas sub 23 estaban destinados a dar al equipo ese impulso de aire fresco y competitividad que nunca llegó y que tanto se echó en falta durante toda la temporada.

Prácticamente ninguno de ellos, con la honrosa excepción de Alberto del Moral, fue capaz en ningún momento del curso de ganarse la titularidad. Y eso, en un equipo del bajo nivel que mostró el CCF la pasada campaña, era un síntoma claro de que las cosas no marchaban bien.

Ya en ese verano de 2020, la dirección deportiva señaló antes de su planificación la importancia de sumar al núcleo duro del equipo varios jugadores jóvenes que aumentaran la competitividad. Para ello llegaron Espeso en el lateral izquierdo, Álex Robles en el derecho, Darren Sidoel en el mediocentro o Alberto Salido en la punta de ataque. Junto a ellos, en el plantel estaban ya Alberto del Moral y Edu Frías, curiosamente los que al final más protagonismo tuvieron en el equipo.

La apuesta por esa hornada de sub 23 se demostró totalmente equivocada y ni si quiera en el mercado invernal se pudo corregir esa falla, pues Alberto Ródenas tampoco dio el rendimiento que se esperaba de él. Era una laguna clara a cubrir y este verano los técnicos parecen haber dado con la tecla para conseguir hacerse con jugadores que desde esas fichas sub 23 aporten al equipo como uno más.

Con esa premisa, Juanito ha sumado en estos meses de planificación a Viedma, Simo, Casas y Visus, que se unen al ya consolidado en el primer equipo Puga y a los Julio Iglesias y Meléndez, quienes también estarán en la órbita del primer equipo durante todo el curso. De ese grupo de prometedores futbolistas han llegado buena parte de los mejores destellos en pretemporada del equipo de Germán Crespo.

En defensa, Puga y Meléndez han mostrado que tienen profundidad y valentía para aportar mucho en ese juego ofensivo que Crespo quiere para sus laterales. Visus, el último en llegar, ha aterrizado con galones y apunta a empezar el curso como titular, reforzado por su alto nivel de concentración y su buena salida de balón. En el centro del campo, Viedma ha podido jugar menos por las molestias que arrastra, pero ya ha tenido tiempo de enseñar su calidad y su sobresaliente golpeo del balón parado. Y en ataque, Simo se perfila como un puñal por cualquiera de las dos bandas, mientras que Casas ha mostrado una brega y un olfato goleador que han encandilado rápidamente a El Arcángel. Tan solo Julio Iglesias, inédito hasta el momento por sus problemas físicos, despierta más dudas.

La confianza del técnico

En ese gran rendimiento mostrado por los jugadores jóvenes del equipo tiene mucho que ver la confianza que Germán Crespo les ha depositado. El técnico ya mostró en el final del curso pasado su valentía para apostar por los chavales que se lo ganan y este año lo ha hecho decididamente, sabedor de que generar esa competencia real en la plantilla será garantía de éxito.

Después de la mala experiencia del año pasado, el Córdoba CF parece haber aprendido de los errores y, lo que es más importante, haber acertado con las incorporaciones de un grupo de futbolistas jóvenes llamados a dar la plantilla ese salto de calidad tan deseado.