El pontanense Roberto Fernández vestirá la camiseta del Barcelona esta temporada 2022-23, en la que el delantero se ha enrolado en las filas del filial azulgrana, que militará en el Grupo II de Primera RFEF. El jugador cordobés llega a préstamo desde el Málaga, club en el que la pasada temporada brilló a sus 19 años en Segunda División.

Ahora, con 20 años, Roberto Fernández ha llamado la atención del filial culé, que ha conseguido la cesión de un futbolista prometedor que se crio en la cantera del Córdoba CF y que ahora está ante una oportunidad de oro para hacerse hueco en un club de la élite mundial.

Nacido en Puente Genil el 3 de julio del 2002, Roberto Fernández inició su andadura futbolística en la cantera del Córdoba CF, subiendo categorías hasta en 2014 fichó por el Sevilla, siendo todavía infantil. En el club de Nervión estuvo tres años antes de regresar al CCF para jugar en su primer cadete. El Málaga se fijó posteriormente  en él y lo firmó para cederlo a uno de sus clubes vinculados, el San Félix. En 2019, el delantero cordobés dio el salto al juvenil malaguista, cuajando una gran temporada en cuanto a cifras de goles.

Su progresión le llevó pronto al filial del Málaga en Tercera RFEF y el curso pasado se asentó en el primer equipo, hasta el punto de disputar en Segunda División un total de 32 partidos, más dos en la Copa del Rey. El pontanense, con 19 años, hizo tres goles y dejó muestras de su enorme talento.

Ahora, con esa experiencia acumulada, el futbolista cordobés llega al Barça Atlètic, la nueva denominación del filial del Barcelona, para ser importante a las órdenes de Rafa Márquez, en un filial azulgrana que competirá en el Grupo II de Primera RFEF con el reto de estar en los puestos altos de la clasificación.