Las notas de los jugadores del Córdoba CF ante el Albacete

Córdoba/El Córdoba CF cerró con empate la temporada en El Arcángel, en un duelo ante el Albacete que los blanquiverdes empezaron muy mal, con un gol regalado en una acción muy desafortunada de Carlos Marín. Con todo, los de Iván Ania supieron reponerse y buscaron la remontada hasta el final, teniendo que conformarse finalmente con el empate.

En un partido marcado por la despedida de Casas tras cuatro temporadas en el club blanquiverde, fue Genaro uno de los hombres más destacados del Córdoba CF. El sevillano actuó como central y destacó en esa faceta, en el que también es su último partido con el CCF.

Así jugaron los jugadores del Córdoba CF en el partido ante el Albacete:

CARLOS MARÍN. Error de bulto. En la primera acción del partido cometió un error grosero que le costó encajar un gol a su equipo. Poco trabajo más allá de esa acción desafortunada tuvo ya el almeriense en el último partido del curso.

CARLOS ISAAC. Insistente. El de Navalmoral de la Mata fue más un carrilero que nunca, subiendo constantemente la banda para ofrecer apoyo a Carracedo en las acciones de ataque. En defensa sufrió con Juanma, pero terminó defendiendo con solvencia su carril.

XAVI SINTES. Seguro. El balear, a pesar de que no ha terminado la temporada en su mejor momento, supo imponerse a Kofane en el duelo ante uno de los delanteros revelación de la categoría. Rozó el gol en un par de acciones de estrategia que cabeceó con intención.

GENARO. Firme. El sevillano actuó como central improvisado y lo cierto es que fue de los más destacados de su equipo, atento siempre al corte y con firmeza a la hora de ganar duelos. Incluso rozó el gol en un par de acciones de estrategia en las que se sumó al ataque.

CALDERÓN. Frenado. El de Paradas brilló poco en el último partido de la temporada, en el que apenas se le vio por el ataque, y cuando se le vio fue sin brillantez para decidir con acierto en los metros finales. Temporada bastante discreta la suya.

ÁLEX SALA. Valiente. El barcelonés, que no tuvo su mejor tarde a la hora de conectar pases y dar fluidez al juego, sí que se atrevió con varios disparos desde fuera del área. En un par de ocasiones incluso rozó el gol, pero se topó con el buen hacer de Rivero.

CARRACEDO. Un puñal. El extremo fue una vez más, y como lo ha sido toda la temporada, el que más generó en ataque para el Córdoba. No tuvo la precisión de otros días a la hora de dar el último pase, pero aun así generó innumerables acciones por su costado.

MAGUNAZELAIA. Dinámico. El eibarrés empezó entonado y tratando de aparecer con continuidad en el centro del campo, ofreciéndose siempre como opción de pase a sus compañeros. Tuvo un par de buenas llegadas al área que no definió de la mejor manera.

THÉO ZIDANE. Incapaz. El francés estuvo todo el partido falto de chispa, incapaz de romper líneas con sus pases y sin capacidad de decisión para culminar las jugadas cuando llegaba al borde del área del Albacete. Ania lo sentó a la hora de juego.

JACOBO. Último gol. El madrileño se quedó con el honor de hacer el gol que cerró la temporada en El Arcángel y en toda la Segunda División, al transformar de manera magistral el penalti que forzó Casas. Lo intentó de todas las maneras hasta encontrar el premio.

OBOLSKII. La tuvo. El ruso gozó de un par de ocasiones muy claras para haber hecho su primer gol en El Arcángel, pero no tuvo fortuna y se topó con un guardameta rival muy acertado. Un partido más de entrega y sacrificio sin el premio del gol que tanto buscaba.

PEDRO ORTIZ. Clarividente. Dio al equipo la frescura que necesitaba en la media hora final para buscar el gol del empate y el de una hipotética remontada. Solo la falta de definición de sus compañeros le previó de acabar el curso con un par de asistencias más.

ANDER YOLDI. Impetuoso. El navarro se despidió con buenos minutos, en los que percutió con peligro por la banda izquierda, generando hasta dos ocasiones claras de gol que Rivero, el meta del Albacete, le frustró.

CASAS. Peleón. El rambleño jugó unos minutos en el tramo final en su último partido con el Córdoba CF y, aunque no tuvo ocasiones de remate claras, forzó el penalti que sirvió a su equipo para rascar un punto ante el Albacete. Despedida dulce para él.