El cordobesismo vive la fiesta del ascenso en El Arcángel y la cita en Las Tendillas será el lunes

Córdoba/Locura tras el pitido final y larga fiesta en El Arcángel. El Córdoba CF celebró con sus aficionados, en el propio estadio, el ascenso a Segunda División certificado con la victoria sobre el Barcelona Atlètic (2-1). La entidad blanquiverde organizó una fiesta en el Reino que se prolongó hasta bien entrada la madrugada, posponiendo hasta este lunes la tradicional visita a Las Tendillas, el lugar de celebración habitual del cordobesismo. Con todo, no fueron pocos los aficionados que, tras hacer otra parada en la fan zone, tan animada como en algunas fases de la tarde aprovechando el fresco de la caída de la noche, se dirigieron a la plaza para dar rienda suelta a su alegría.

La fiesta no tardó en comenzar. Tras el pitido final de Muresan Muresan, los jugadores se derrumbaron sobre el césped tras el esfuerzo realizado, con las lágrimas aflorando sobre el rostro de muchos de ellos, con una alegría desbordada por haber culminado con éxito la temporada. La obligada visita al Fondo Sur, desde donde el empuje del sector más animoso de la afición levanta el estadio cada partido, fue el inicio de una vuelta de honor con la afición enloquecida, rompiéndose las manos a aplaudir a los suyos, a sus héroes, esos que han devuelto el fútbol profesional a El Arcángel un lustro después. No era para menos, porque este ascenso es de toda una ciudad, de toda una provincia, de toda Córdoba.

Con los flashes de los fotógrafos sin dar un respiro, con las cámaras a tope, a la plantilla y el cuerpo técnico, los primeros en vivir la fiesta sobre el verde, se fueron sumando los miembros de la dirección deportiva, con Juan Gutiérrez, Juanito, y Raúl Cámara a la cabeza, y el cabeza visible del proyecto, el CEO de la entidad, Antonio Fernández Monterrubio, que ha dado en la diana en su primera temporada en el club. Junto a él aparecieron Abdulla Al-Zain y Mohammed Al-Nusuf, presidente y vicepresidente del club, que por fin pudieron vivir una celebración como Dios manda en El Arcángel.

Porque tras los primeros festejos, culminados con el acto oficial que confirmaba al CCF como nuevo equipo de Segunda División, y mientras la megafonía anunciaba que la fiesta iba a continuar en El Arcángel, sin trasladarse a otro lugar, el terreno de juego se fue quedando vacío. Los jugadores se retiraron a los vestuarios e Iván Ania cumplió con la rueda de prensa protocalaria, en la que volvió a dar una master class de cómo debe mostrarse un entrenador ante la prensa. El próximo año volverá a hacerlo, porque el ascenso garantiza su continuidad al frente del proyecto. Gracias.

Toril, Diarrá y Ania, los más ovacionados

Con las gradas de El Arcángel despoblándose, los actos festivos arrancaron con la interpretación del himno del club por parte de India Martínez, que saltó al campo con una camiseta con el dorsal número 13. Pero sin duda el plato fuerte fue la presentación, uno a uno, de los verdaderos héroes del ascenso: la plantilla. Entre los más ovacionados, sin duda, Alberto Toril, autor del doblete decisivo ante el filial azulgrana; Yussi Diarrá, al que la afición pidió su continuidad, y el capitán Kike Márquez. Capítulo aparte para Iván Ania, el último en aparecer, pero el más importante en esta gesta histórica por comandar hasta el mejor puerto este barco.

Y que no dudó en coger el micro para, en primer lugar, hacer pasar al escenario colocado en el centro del terreno de juego a todo su cuerpo técnico y su staff. Detalles, sin más. Como acordarse de “todo el apoyo de la afición durante toda la temporada, pero especialmente en este último mes que ha sido increíble”. “Quiero que podamos disfrutar del fútbol profesional el año que viene y ojalá durante muchísimos años”, sentenció el técnico ovetense, clave en la fusión de la familia cordobesista que salió del campo bajo los acordes del himno.

Un himno que este lunes volverá a oírse, con toda la fuerza del mundo, en la plaza de Las Tendillas, en el fin de una fiesta que comenzó el domingo y que se prolongará, al menos hasta última hora de este lunes. Antes, por la mañana, será el turno de los actos institucionales y la visita a San Rafael, con un posterior almuerzo privado. Ya por la tarde, cuando el calor remita, tocará el turno de salir a las calles con un autocar descapotable desde el que el Córdoba CF recibirá el cariño de sus aficionados. Porque el Córdoba es de Segunda. ¡Hemos vuelto… y toca disfrutarlo!