El Albacete, equipo a caballo entre Segunda B y Segunda División en las últimas campañas, salvó apuradamente la categoría el pasado ejercicio. En el actual marcha quinto, a cuatro puntos del ascenso directo, a expensas de la resolución final del caso Reus. Sus números hablan por sí solos: invicto en casa, donde ha firmado cinco triunfos y seis empates, es junto al Granada y el Deportivo el equipo que menos derrotas ha encajado, con tres, y el segundo mejor visitante, tras el cuadro nazarí.
Por si esto fuera poco, es uno de los conjuntos más goleadores (30 tantos) y uno de los que menos encajan (20). Antes de caer en el último partido que jugó, frente al Dépor, encadenó 12 jornada invicto, con siete triunfos y cinco empates.
Pero los problemas le han llegado al técnico, Luis Miguel Ramis, en este mercado invernal, con la marcha de dos de sus jugadores fijos: Erice y Olivera. Además, también han salido Chus Herrero, Adri Gómez, Paulo Vítor, Ortuño o Jean Jules, mientras que sólo han llegado Borja Herrera y Álvaro Peña.
Sin balón
Ramis plantea habitualmente un 4-2-3-1 que por momentos se transforma en un 4-4-2. Con uno u otro sistema, el Albacete trata de jugar el balón desde atrás, aunque exhibiendo intensidad, carácter y garra, y sin desaprovechar el contragolpe cuando hay ocasión.
Con Tomeu Nadal en la portería, el técnico coloca una línea de cuatro por delante en la que sistemáticamente ha venido alineando a Tejero y Olivera en los laterales, con Arroyo y Gentiletti en el eje. La baja de Olivera podría llevar al debut de Borja Herrera en el costado izquierdo, con la alternativa de Fran García. Los laterales son correctos atrás y tienen proyección ofensiva, aunque recuperan bien la posición tras pérdida. Por el centro, la clave es la contundencia.
Con balón
La baja definitiva de Erice y la probable ausencia por lesión de Eugeni son un problema para Ramis. En el doble pivote, centro neurálgico de las acciones ofensivas y defensivas del Albacete, quedan Febas y Malsa, al estar Barri también tocado, si bien se pueden adaptar Álvaro Peña o Susaeta.
El conjunto manchego busca tener el balón, sin renunciar a los lanzamientos en largo para desintoxicar la medular. Con Bela y Acuña o Susaeta en los costados, y este último o Eugeni por el centro de las medias puntas, los hombres más adelantados –Zozulya, sólo o junto a Rei Manaj– tienen garantizada la creación de ocasiones.
Lo mejor
La tranquilidad clasificatoria.
Lo peor
La salida de Erice y Olivera.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios