La negociación entre el Córdoba CF y el grupo inmobiliario Tremón por el arrendamiento de la Ciudad Deportiva aún guarda varios capítulos en las próximas semanas. Ambas partes no terminan de cerrar un pacto sobre papel y el club tuvo que abandonar este miércoles las instalaciones del Camino de Carbonell al ejecutarse una orden judicial de finales de marzo de este año.

Sin embargo, ninguna de las dos partes contemplan la ruptura definitiva de las negociaciones, asumiendo que están condenadas al entendimiento. Por un lado, el Córdoba necesita de las instalaciones para que sus equipos trabajen a diario. Por otro, Tremón es consciente de que la Ciudad Deportiva solo es accesible para el club blanquiverde y esos terrenos no serán rentables si no son arrendados al CCF.

Eso sí, en el grupo inmobiliario no ha sentado nada bien la espantada propiciada por los propietarios del club de El Arcángel. Desde Bahréin se pusieron objeciones al acuerdo alcanzado por los gestores del club en Córdoba y ahora Tremón se plantea endurecer su postura. Así lo reconoció el abogado que representa a la compañía en este caso, un Marino Turiel que en La Jugada de Córdoba de Canal Sur Radio avisó de que las condiciones podrían variar en los próximos contactos.

"Creemos que se ha frustrado un acuerdo que era perfectamente viable y en este momento la compañía se va a replantear su posicionamiento en relación a las condiciones en las que se pretenda adquirir la posesión de esa Ciudad Deportiva", apuntó, para aclarar que "probablemente la compañía modifique su actuación y reclame o modifique que las prestaciones tengan que ser incluso superiores" a las anteriormente pactadas.

Esa es la consecuencia de los vaivenes que Infinity ha provocado en las conversaciones, lo que también coloca en una situación difícil al equipo gestor del club, con Javier González Calvo a la cabeza. Pese a ello, Turiel recalcó que "siempre que haya voluntad concurrente y buena fe, seguro que hay tiempo", dejando la puerta abierta a una entente, pero apostillando también que, a su juicio, "en este momento, francamente, no la ha habido".

Pese a todo, fuentes de la negociación siguen manteniendo que el acuerdo acabará llegando a buen término y el club podrá seguir utilizando una instalación que es fundamental para su día a día. ¿Cuándo llegará por fin la fumata blanca? Todo apunta a que, como el resto de asuntos pendientes en la entidad, empezarán a acelerarse la próxima semana.