En la próxima actualización del diccionario de la Real Academia de la lengua Española, bajo la acepción del término revulsivo bien podría colocarse una imagen de Pablo Alfaro, como ejemplo más ilustrativo del significado de esa palabra. El aragonés ha cumplido a la perfección con la tarea que la dirección deportiva del Córdoba CF le encomendó hace ahora un par de semanas y lo ha hecho con tres victorias seguidas y logrando que su equipo deje la portería a cero, unos números que hace más de tres lustros que no se repiten en el club de El Arcángel.

Los números que presenta el técnico en el arranque de su etapa en el Córdoba son realmente espectaculares. Pleno de puntos en liga y una ronda de Copa en el bolsillo, con una imagen diametralmente opuesta a la que el equipo venía mostrando en las semanas previas a su llegada. Además, sin encajar gol. Todo ello en un tiempo récord pero que ya ha quedado registrado en la historia del club. Porque desde 2003 el conjunto blanquiverde no encontraba un técnico que resultara tan efectivo en tan corto espacio de tiempo. Fue Miguel Ángel Portugal el último que consiguió imprimir al equipo esa capacidad de cambiar dinámicas de manera espectacular.

Según los datos recogidos por el especialista en estadística Álvaro Vega (@LaLigaenNúmeros), Portugal inició su andadura en el banquillo cordobesista con esta racha que ahora ha conseguido Pablo Alfaro. En aquel entonces, el Córdoba superó al Algeciras (2-0), al Recreativo (0-2) y al Cádiz (1-0) después de que Miguel Ángel Portugal tomara el relevo a Fernando Castro Santos, cuando el club estaba en Segunda División. Portugal, de hecho, consiguió alargar esa gran dinámica una semana más, al superar al Salamanca (0-1) una semana después.

Ese es el reto que ahora tiene por delante Pablo Alfaro, y que podrá cumplir si su equipo mantiene el nivel en la segunda ronda de la Copa del Rey, con la que el Córdoba abrirá la competición el año 2021 en El Arcángel. Hasta la fecha, el resultado ha sido perfecto ante el Real Murcia (0-1), El Ejido (4-0) y el Albacete.

Las sensaciones, acordes a los números

Más allá del gran arranque estadístico que Pablo Alfaro ha conseguido al frente del Córdoba están las sensaciones, que se corresponden a la perfección con el revulsivo que el equipo necesitaba para recuperar el rumbo perdido.

El técnico aragonés ha logrado además involucrar a todos los futbolistas y la prueba fehaciente de ello es que sus hombres volvieron a competir con una intensidad y una concentración elogiables en Copa del Rey, a pesar de que el once inicial presentaba siete cambios y del esfuerzo hecho solo 72 horas antes para golear a El Ejido.

En tan solo dos semanas, Alfaro le ha cambiado la cara al equipo de manera radical. Eso sí, tanto el míster blanquiverde como sus jugadores son conscientes de que aún no han hecho nada y que la parte importante de la temporada está aún por llegar. Una certeza que no quita para que el Córdoba pueda despedir el 2020 con una sonrisa y mirar con esperanza e ilusión al 2021.