Con apenas ocho años de vida como club, el Lorca Deportiva ha cogido el testigo de los históricos de la ciudad tristemente desaparecidos y ha recuperado la ilusión por el fútbol en la localidad murciana. El conjunto lorquino, que el domingo será el rival del Córdoba CF en el estreno liguero en El Arcángel, parte con una plantilla renovada tras cerrar nueve incorporaciones, y con unos objetivos en principio bastante alejados de los que persigue el equipo de Juan Sabas.

Bajo la presidencia del argentino Hugo Issa, un exfutbolista y agente de jugadores, el Lorca Deportiva recuperó hace unos meses la categoría de bronce y aspira a consolidar su proyecto antes de poder mirar de nuevo con realismo al fútbol profesional. El presente curso será su cuarta participación en Segunda B.

El conjunto lorquino mantiene una buena base del equipo que tan bien rindió el curso pasado en Tercera División y que terminó por ascender de categoría, con veteranos como el portero Alberto Hortal, el central Ángel Robles y el delantero (y capitán del equipo) Andrés Carrasco -que no estará en El Arcángel por sanción- como columna vertebral. Al frente del cuadro blanquiazul sigue Iban Urbano, técnico vasco que consiguió el objetivo del salto de categoría y que ha visto su plantilla renovada con hasta nueve incorporaciones.

El peso de Hugo Issa en la confección del plantel ha deparado que el Lorca Deportiva cuente con hasta cinco jugadores argentinos en sus filas. A Baroni, presente el curso pasado, se han sumado este verano el mediocentro Nizzo, el lateral zurdo Coyette, el mediapunta Marconato y el extremo Marcos Legaz (ex del Real Murcia). Ellos han sido los refuerzos más llamativos de un plantel completado con nombres de perfil modesto como el lateral derecho Emilio Iglesias, el central Héctor Galiano, el portero Iván Martínez, el central Nacho Pastor o el extremo derecho Julen Gutiérrez.

Esas nueve caras nuevas, junto a la base de futbolistas que continúan en el club, hacen del Lorca Deportiva un grupo de futbolistas con veteranía y experiencia en Segunda B y Tercera, rejuvenecido con algunas apuestas en las fichas sub 23.

El conjunto que dirige Iban Urbano ha completado una pretemporada bastante discreta, con tres victorias y dos derrotas en cinco partidos disputados, casi todos contra equipos de Tercera División como el Mar Menor, el Águilas, La Unión y el Jove San Vicente. Solo ante el UCAM Murcia -contra el que cayeron por 0-1- han medido fuerzas los lorquinos con un rival de la misma categoría.

Solidez atrás, poca pólvora arriba

Con el 4-2-3-1 como sistema de partida para su técnico, el Lorca Deportiva ha dejado muestras de ser un equipo sólido en defensa, que encaja pocos goles, pero que también tiene problemas a la hora de hacerlos. Hasta en tres de sus amistosos ha dejado el cuadro lorquino su portería a cero, con solo dos goles encajados, uno ante el Mar Menor y otro ante el UCAM Murcia, en las dos derrotas del verano. En ataque, solo cuatro goles ha hecho el equipo de Iban Urbano, dejando evidencia de que la ofensiva es quizás su parte más débil.

Con todo, el cuadro de la Región de Murcia cuenta con buenos atacantes como su capitán, un Andrés Carrasco que hizo 18 goles el curso pasado en Tercera División, los mismos que Javi Bolo, el otro gran referente en ataque. Otros jugadores a tener en cuenta son Musoni, punta rápido y versátil, el extremo Marcos Legaz, que dejó destellos de su calidad en el Real Murcia, o el recién incorporado Marconato, con trabajo y llegada desde segunda línea.

Por su condición de recién ascendido y la fisonomía de su plantilla, el Lorca Deportiva apunta a ser el primer rival que ponga a prueba la variedad ofensiva de un Córdoba CF que tendrá que asumir el peso del partido ante un equipo al que no le pesará adoptar un rol más defensivo.