Sergi Guardiola regresa el domingo a Santo Domingo, el escenario en el que vivió su estreno como futbolista de Segunda División en agosto de 2015, convertido en una de las sensaciones de la actual temporada en la categoría de plata. Con 15 tantos en su haber en el campeonato liguero (más un par en la Copa del Rey) y en el camino de hacerse con un lugar en la historia goleadora del Córdoba, el ariete de Jumilla visitará con cierta sed de venganza a un Alcorcón del que se vio empujado a salir por la puerta de atrás en su primera experiencia como profesional y al que ya en la primera vuelta, en El Arcángel, hizo una diana con la que se cerró la goleada blanquiverde (3-0).
Tras curtirse entre Segunda B y Tercera, en clubes de la zona levantina como el Jumilla, La Nucía, el Ontinyent o el Novelda -previo efímero paso por el Getafe B, también en la división de bronce-, un brillante ejercicio en el Eldense, con 17 goles, le valió para firmar por el Alcorcón un contrato de tres temporadas. Llegaba con el aval de Quini, uno de los mejores jugadores de la historia alfarera con el que había coincidido en Elda, pero nunca tuvo la total confianza de Juan Ramón López Muñiz, a pesar de que participó ya en las dos primeras jornadas de ese curso 15-16 (su estreno fue en la cita inaugural ante el Mallorca, cuando en el tramo final del encuentro sustituyó a Óscar Plano).
Así, tras acumular apenas 61 minutos en cuatro partidos en la primera mitad de la temporada, con la apertura del mercado de invierno Guardiola rescindió su contrato para iniciar una nueva aventura vinculado al Granada, su acomodo tras el frustrado pase al Barcelona. Primero formando parte de su filial, en el Grupo IV, y luego jugando a préstamo en el Adelaide United de la Liga A australiana y en el Murcia. El pasado verano, sin sitio en el proyecto de Oltra ya con el cuadro rojiblanco de vuelta a Segunda, rescindió su contrato con el club nazarí y se comprometió con el Córdoba por dos campañas, hasta junio de 2019, aunque su trayectoria personal y la del equipo invitan a pensar en un final de trayecto anticipado. De hecho, ya hubo interés de algún equipo inglés en enero, pero la entidad se remitió a su cláusula de seis millones, que se quedaría en la mitad en caso de descenso.
Pero hasta entonces, Guardiola tiene como único objetivo seguir ayudando con sus goles (y mucho más) en la carrera a la desesperada por la permanencia que ha emprendido el equipo. De momento ya está consolidado como uno de los mejores jugadores de la categoría y, con 15 tantos, es la principal amenaza de Mata (23 dianas con el Valladolid) en la lucha por el pichichi. Por ahora, sus registros mejoran a los del añorado Florin Andone, y no sólo en acierto, pues con cinco ya es también el máximo asistente del CCF. Toda una garantía para buscar el asalto a Santo Domingo, el escenario que hace dos años y medio lo vio debutar en Segunda y en el que el ariete quiere dar otro paso hacia Primera... echando otra mano al Córdoba.
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