El Córdoba CF está de celebración en este domingo 16 de abril antes de su partido ante el Alcorcón. El conjunto blanquiverde cumple hoy el primer aniversario de su ascenso a Primera Federación, que se consumó hace justo 365 días en el Romano José Fouto de Mérida. En el feudo emeritense los blanquiverdes dieron el paso definitivo que cerraba una temporada de ensueño en Segunda RFEF. Un paseo militar que compensó, en parte, el desastre de verse relegado a la cuarta categoría del fútbol español para el conjunto cordobesista.

Antes incluso de finalizar su partido ante el Mérida de la antepenúltima jornada de liga, el Córdoba ya era equipo de Primera Federación. El resto de resultados de la jornada dieron oficialidad al ascenso en el descanso del partido en el Romano. Los futbolistas blanquiverdes saltaron entonces al terreno de juego para celebrar el éxito con los aficionados que se habían desplazado para vivir el encuentro en directo.

Tras esa explosión de júbilo, los hombres entrenados por Germán Crespo serenaron los ánimos y se centraron en finalizar el partido de la mejor manera posible, llegando incluso a anotarse el triunfo gracias al gol de Antonio Casas. Un broche perfecto para una tarde inolvidable.

Aquella victoria, y las dos que llegarían posteriormente en los dos encuentros que ponían el cierre a la temporada, supusieron unos números históricos para el Córdoba CF, que culminó la liga con 82 puntos en 34 partidos, fruto de 25 victorias, siete empates y dos derrotas. Uno de esos reveses, además, llegó en los despachos por la alineación indebida de Javi Flores ante la UD San Fernando. Pero la superioridad de los blanquiverdes fue tal que ni siquiera la pérdida de esos tres puntos supuso problema alguno.

En un curso que sirvió para el disfrute del cordobesismo, dejando de lado que la entidad de los rivales no era ni mucho menos la más exigente, se vieron 86 goles del Córdoba y solo 29 encajados. Unos registros que quedarán para la historia y que serán muy complicados de superar.

Siguen una docena de jugadores

Solo 12 meses después de consumar el ascenso a Primera Federación, en el Córdoba apenas quedan ya una docena de jugadores de aquella plantilla que a tan buen nivel rindió en la cuarta categoría del fútbol español. Entre el verano y el reciente mercado invernal, otros tantos abandonaron el barco después de vivir una experiencia inolvidable en El Arcángel.

Los Felipe Ramos, Carlos Marín, José Ruiz, Puga, José Alonso, Ekaitz Jiménez, Dragisa Gudelj, Javi Flores, Simo, De las Cuevas, Antonio Casas y Willy Ledesma -más los jóvenes Christian Delgado, Rafa Castillo, Abreu y Manolillo, que continúan en el filial- siguen con vinculación en el Córdoba CF 365 después de celebrar por todo lo alto aquel ascenso que devolvió a la entidad a una categoría más acorde a su nivel. Un paso más cerca del fútbol profesional.

Además de Germán Crespo, recientemente destituido tras la negativa racha de resultados cosechada por su equipo, ya pasaron a la historia del club otros artífices del ascenso desde el césped -con diferente protagonismo en cada caso- como fueron Bernardo Cruz, José Cruz, Visus, Tala, Meléndez, Toni Arranz, Álex Bernal, Viedma, Julio Iglesias, Luismi, Omar Perdomo, Ale Marín, Samu Delgado y Adrián Fuentes.

Todos ellos guardan un pedacito de ese ascenso que supuso un punto de inflexión en el proyecto de Infinity y que devolvió a la sufrida afición blanquiverde la ilusión perdida. Esa misma que ahora tratan de retomar, con las miras puestas en seguir peleando por dar el salto de manera inmediata al fútbol profesional.