Córdoba CF

El uno por uno del Córdoba ante el Almería (1-0)

  • Un tanto de Piovaccari da al cuadro de Sandoval el primer triunfo liguero

Once inicial del Córdoba ante el Almería.

Once inicial del Córdoba ante el Almería. / Álex Gallegos

CARLOS ABAD Tranquilo. No tuvo mucho trabajo el canario, algo que le debió resultar extraño tras los últimos partidos. Estuvo seguro por alto y en las jugadas a balón parado. Se merecía dejar su portería a cero.

LOUREIRO Discreto. Una de las novedades en el once inicial de Sandoval. El lateral gallego sufrió para contener a Rioja y las subidas de Andoni López. Aún así, solventó la papeleta. En ataque apenas se le pudo ver.

QUINTANILLA Firme. Completo partido del vasco, que mantuvo la concentración en todo momento y no dio espacios a Álvaro Giménez. Es el termómetro de su equipo. Cuando está bien, el CCF está cerca del triunfo.

AYTHAMI Acelerado. El central canario acabó el encuentro expulsado con roja directa merced a un enganchón con Corpas en la jugada final del encuentro. Se perderá el choque de Pamplona por una acción innecesaria.

QUEZADA Frenado. Muy pocas incursiones en ataque de un jugador que tiene en esa proyección su mayor virtud. En defensa solventó la papeleta aunque quedó condicionado por la tarjeta amarilla que le mostraron.

BAMBOCK Sereno. Después del despropósito de partido que se marcó en Los Cármenes, el mediocentro blanquiverde estuvo algo mejor, sobre todo en cuanto a tranquilidad y colocación se refiere. Se vació en defensa.

QUIM ARAUJO Desapercibido. El esfuerzo no sirve si se aporta tan poco al equipo y eso en un jugador que tenía la misión de domar la pelota, es más insuficiente aún. No tuvo el peso esperado en el juego colectivo del equipo.

ÁLVARO AGUADO Revitalizado. Le ha sentado bien la renovación, que le permite centrarse en lo que mejor sabe haber, jugar al fútbol. El jienense fue el motor de su equipo y todo lo que intentó el CCF salió de sus botas.

JAIME ROMERO Escurridizo. Sin mucha continuidad en el juego, como es habitual en él, fue de lo mejor del equipo en ataque. Puso en dificultades a Andoni López y en una de sus internadas por la derecha llegó el gol local.

JOVANOVIC Desaparecido. El balcánico se pierde cuando tiene que actuar a pierna cambiada. Muchas ganas de correr y buenos desmarques pero poca produccción real. Le lastró demasiado una tempranera tarjeta amarilla.

PIOVACCARI Lo merecía. Señalado en el choque de Los Cármenes, con aquel cambio a los 19 minutos de partido, el italiano comprobó en sus carnes que el fútbol es así de caprichoso y que en apenas siete días se puede encontrar revancha tras un sofocón. El italiano dejó atrás el peor momento de la temporada y se marcó un buen encuentro, en el que fue siempre el principal argumento ofensivo de su equipo, y en el que derrochó ganas a pesar de encontrar poco acierto. En una mala primera parte colectiva, Piovaccari falló de manera inexplicable un mano a mano de los que con él van siempre para la red. Aún así, no desesperó el punta transalpino, que volvió a intentarlo antes del descanso y que en la reanudación tuvo hasta tres intentos antes de empalar un balón suelto y hacer el tanto de la victoria de su equipo. Lo merece por lo vivido en Granada y por la entrega puesta sobre el césped.

JAVI GALÁN Revolucionado. Entró dar mayor profundidad a la banda izquierda y no tuvo demasiada claridad con el balón debido al exceso de revoluciones con el que se empleó. Eso sí, fue un pulmón y luchó cada balón que tuvo.

BLATI TOURÉ Dinámico. Entró para refrescar la medular después de que Álvaro Aguado se tuviera que marchar con molestias. No estuvo especialmente brillante pero aportó ese extra de energía tan necesario.

LUIS MUÑOZ Muro. Sandoval tiró del malagueño como último recurso para defender la renta conseguida. Se incrustó como hombre libre entre los dos centrales y ayudó a contener los arreones finales del Almería.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios