El Córdoba presentó ayer su primer Business Club, un tejido empresarial que pretende fomentar las sinergías entre sus miembros, con la entidad blanquiverde como principal aliado, y que ya ha puesto su "granito de arena", como dijo el director general, Alfredo García Amado, en el límite salarial.

Casi un centenar de empresas se han adherido a este proyecto de networking al que el club invita a sumarse "como puente para mejorar sus resultados", según advirtiío el presidente, Jesús León, que recordó que el club está para ayudarles "en todo lo que podamos y que saquéis el máximo beneficio".

Una ayuda recíproca que tiene como objetivo el crecimiento deportivo e institucional de la entidad cordobesista gracias al "apoyo y patrocinio" de estas empresas que deben resultar parte del engranaje que conduzca al CCF en el mayor breve espacio de tiempo a la élite, pero ahora con voluntad de continuidad.