Los vecinos de Encinares de Alcolea llevan su protesta al Ayuntamiento: "Estamos abandonados e indignados"

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Endesa insiste en que está obligada por ley a cortar el suministro, mientras que los afectados reclaman la mediación del equipo de gobierno municipal

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Concentración de los vecinos de Encinares de Alcolea frente al Ayuntamiento de Córdoba / Cristina del Moral

Los vecinos de la urbanización Encinares de Alcolea, en la zona Este de la capital cordobesa, llevan desde el pasado 14 de mayo haciendo guardia de día y de noche delante de un transformador de Endesa para evitar que la compañía les corte el suministro de luz. Desde entonces, los operarios no han podido llevar a cabo su trabajo debido a la presión de los vecinos acogiéndose a que no pueden hacerlo al no tener una orden judicial.

Este martes han dado un paso más y se han concentrado delante del Ayuntamiento de Córdoba -alrededor de un centenar, incluidos menores de edad- y han protagonizado una sonora pitada para pedir la mediación del alcalde, José María Bellido, en este problema después de que la Consejería de Industria de la Junta de Andalucía haya dado la orden de proceder a la desconexión por el peligro de la instalación.

El portavoz de los vecinos afectados es Rafael Salinas, quien desde el primer momento ha asegurado que los residentes de la urbanización Encinares de Alcolea afectados se sienten "un poquito abandonados por las instituciones, indignados y hundidos".

Un momento de la protesta frente al Ayuntamiento
Un momento de la protesta frente al Ayuntamiento / Cristina del Moral

Para saber qué pasa exactamente hay que retroceder 16 años, cuando se recepciona la obra de la urbanización de la tercera fase de la misma y "se queda una fase un poquito al margen porque faltaba una de las instalaciones por terminar", ha detallado. En concreto, hace más de una década, cuando la obra se fue a recepcionar, Endesa ya alertó de que la red no cumplía la normativa y obligó a hacer una obra en la que los propietarios gastaron en torno a 150.000 euros. Un pago que hicieron pero, según ha explicado Salinas, "cuando se entregaron los papeles, fue una sorpresa para todos los vecinos porque nos dimos cuenta un poco de que había cambiado otra vez la normativa y todo lo que se había metido no servía otra vez". Es decir, la normativa había cambiado y la obra no se ajustaba a los requisitos de seguridad, de manera que desde entonces la electricidad llega a las viviendas con una instalación provisional.

Además, ha reconocido que sus viviendas no tenía licencia de primera ocupación: "Pagamos una casa que costó en su día 270.000 euros y hemos estado viviendo sin esa licencia, por lo que la luz y el agua es más cara; muchos bancos no te daban la hipoteca que tú querías, tenías que acogerte al banco que te diera la hipoteca".

En bucle desde 2023

Los vecinos, según ha anotado Salido, han vivido "en una especie de bucle desde entonces hasta que en 2023 se consigue parar porque la entidad de conservación se mete un poquito y dice que va a asumir los gastos". Así, ha detallado que se contrató a Magtel que se hizo cargo de la obra de las calles Fresno, Quejigo y Chaparrera de la urbanización, "pero hay un pequeño fallo que dice Endesa que hay que en la línea de media y que, según normativa, no deben ir juntas con la línea de baja". "Esto paraliza otra vez la obra y llegamos a 2025 siempre con la luz precaria y Endesa detecta que los cables que llevan ya muchísimos años están por fuera y que hay un problema", ha detallado.

Otro momento de la concentración
Otro momento de la concentración / Cristina del Moral

Así las cosas, Endesa considera que la instalación es peligrosa, quiere cerrarla y, por tanto, parte de la urbanización se quedaría sin luz. "De primeras no da alternativa y nos dice que el corte se va a hacer efectivo; no dan solución, sino lo que nos dicen es que van a cortar la luz", ha subrayado, al tiempo que ha insistido en que "a través de la entidad de conservación, nuestro abogado y la comunidad estamos buscando soluciones desesperadas".

Petición al Ayuntamiento de Córdoba

Los residentes van a continuar haciendo guardia para evitar que Endesa les corte el suministro eléctrico y, aunque el Ayuntamiento de Córdoba no tiene competencias para nada en este tema han solicitado que medie a través de la Gerencia de Urbanismo. Al respecto, Salinas ha asegurado que ayuntamientos de otras ciudades con problemas similares "han hecho su labor de parar inmediatamente el corte, pero no han conseguido hacer el arreglo".

A su juicio, el Ayuntamiento de Córdoba ha de ejercer de mediador: "Nosotros elegimos a nuestros representantes y esto pueden pararlo; queremos que arreglen el corte y que den una solución a una cosa que llevamos 16 años con ello".

Salinas ha indicado también que el número de personas afectadas son alrededor de 200, mientras que la cifra de viviendas es de 63. Los vecinos han presentado una denuncia al respecto ante el Juzgado de Guardia y ahora están esperando la resolución.

"Instalaciones peligrosas"

Ante esta nueva protesta vecinal, fuentes de Endesa han señalado a este periódico que "desde hace tiempo cada vez que nos hemos reunido con los vecinos de esta zona les hemos avisado de la necesidad de ejecutar según normativa las instalaciones eléctricas que tenían y estábamos a la espera de su ejecución".

"Recientemente, los vecinos se han movilizado ante Industria, con una denuncia contra Endesa notificando una instalación provisional nueva de la que no teníamos conocimiento hasta la llegada de la denuncia. Esas instalaciones son peligrosas y no cuentan ni con autorización de Industria ni el visto bueno de Endesa", han subrayado.

En esta línea, han aseverado que "por razones de seguridad de las personas y de las instalaciones estamos obligados por ley a cortar el suministro. Aun así, estamos en continua comunicación con los vecinos a los que les hemos ofrecido soluciones técnicas para agilizar los trámites para que la instalación cumpla normativa".

Por su parte, desde el Consistorio han señalado a El Día de Córdoba que llevan a cabo labores de mediación para agilizar el proceso.

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