La tendencia de los cigarrillos 'low cost'

La subida del precio del tabaco en los últimos meses y la entrada en vigor de la nueva ley más restrictiva contra los fumadores han tenido dos efectos en los consumidores: muchos ciudadanos han reducido su dosis diaria de nicotina y otros tantos se han visto abogados a buscar alternativas económicas para saciar su adicción. Esto último ha traído consigo la aparición de los cigarrillos de bajo presupuesto o low cost, con las marcas blancas, una verdadera eclosión de la picadura e, incluso, el uso del tabaco de pipa para liar.

"En los barrios esto último comenzó a venderse hace unos meses, pero en el centro, donde los vecinos suelen tener un poder adquisito más alto, ha empezado ahora", confesaba ayer Antonio José Pérez, el titular de un estanco situado junto al conservatorio de la calle Ángel de Saavedra. El paquete de cien gramos de Special Star, especial para pipa, cuesta sólo cuatro euros, frente a los 3,85 euros que vale la bolsita de 30 gramos de Pueblo, la marca líder para los cigarrillos de liar.

Este tendencia ha traído consigo la proliferación de accesorios para los fumadores, desde recipientes para portar el tabaco, los filtros y el papel, hasta maquinitas para que hacer el pitillo no se convierta en una odisea. Las más básicas valen en torno a los siete euros, aunque también las hay eléctricas, con un coste que ronda los 30 euros, detalló el estanquero.

La otra forma de reducir el coste del tabaquismo consiste en sustituir las marcas comerciales de siempre por otras nuevas poco publicitadas. La marca más ecónomica ahora mismo fabrica las cajetillas de Fraternité (equivalente al Ducados rubio), Liberté y Egalité (light), un trío con los colores de la bandera francesa, aunque made in Germany. La cajetilla sale por 3,30 euros. Otras alternativas también para los bolsillos ajustados son el Austin, el 821, el Maryland o el Ibiza. Por el contrario, quienes se quieran dar un capricho, está el Dunhill International, tabaco inglés por el que hay que pagar 4,60 euros la cajetilla, detalló Pérez.