La Delegación de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación ha encontrado en Córdoba 3.773 solicitudes de dependencia “que estaban pendientes de grabación y que no aparecían registradas en el sistema”.

La Junta ha informado de que “1.258 son solicitudes de iniciación del procedimiento de dependencia y 2.515 son de revisiones de grado. “Estas más, de 3.700 solicitudes no estaban contabilizadas en ninguna lista de espera, como sí lo estarán a partir de ahora, ya que estamos procediendo a grabar para que estas personas cuenten en el sistema y puedan acceder a las prestaciones y servicios a los que tienen derecho”, ha señalado la consejera del ramo Rocío Ruiz. A nivel de Andalucía, estas solicitudes ascienden a 21.013.

Además, ha resaltado que a fecha de 31 de agosto de este 2019, en la provincia de Córdoba se atiende a 22.518 personas en situación de dependencia que cuentan con 30.115 prestaciones.

Ruiz ha destacado también que “desde la puesta en marcha del plan de choque en materia de dependencia, en abril de 2019 (abril-agosto 2019), se ha incorporado en Córdoba a 1.774 nuevas personas al sistema para la autonomía y atención a la dependencia y 2.824 prestaciones.

“Por tanto, si crecen las listas de espera es simplemente porque no ocultamos a nadie. Aparecen las personas que esperan su valoración, su programa individual de atención, y todas las solicitudes que el Gobierno socialista dejó en el limbo y ahora están aflorando gracias a las medidas de agilización y digitalización que hemos adoptado”, ha recordado la consejera.

El plan de choque que se está desarrollando cuenta con una inversión de 77 millones de euros y tiene como objetivo simplificar los trámites, agilizar la lista de espera y garantizar el cumplimiento de los plazos de concesión de las prestaciones y servicios.

Un único sistema integral

Pero, ¿qué pasa ahora con estas personas que no están registradas? Pues, según han explicado fuentes de la Junta, se incorporarán al sistema. “Se está avanzando en la digitalización de toda la gestión de la dependencia –ventanilla electrónica–, así como el desarrollo de un sistema integral de información que incorporará la tramitación electrónica en su gestión”.

Las mismas fuentes han recordado que el citado plan que se lleva a cabo “tiene como objetivo desarrollar y evolucionar las diferentes fuentes y sistemas de información para configurar un único sistema integral de gestión de la dependencia en el que se concrete la fiabilidad, accesibilidad y transparencia”.

La tercera de las medidas, han continuado, ha sido “la priorización del reconocimiento del grado y el derecho a las prestaciones a determinados grupos de especial vunlnerabilidad, en concreto, a menores de 21 años y personas mayores de 80 años con dependencia moderada”.

Este último anuncio hecho por la Junta se suma al que hizo en marzo del año pasado el mismo departamento que preside Rocío Ruiz. En aquella ocasión y, tras las conocidas listas de espera sanitarias, había 4.624 cordobeses que tampoco estaban contabilizados en las estadísticas publicadas cada mes sobre dependencia.

Ese informe cifraba en 6.620 los cordobeses pendientes de que se les realizase su plan individual de atención, para poder disfrutar de algún recurso del catálogo de la Ley de Dependencia (prestación económica, atención residencial, centro de día, ayuda a domicilio, teleasistencia…).

Pero aún hay más, porque en abril de este año la Junta detectó que desde 2016 han muerto en Córdoba 2.860 personas sin que el Ejecutivo autonómico hubiera resuelto su expediente sobre dependencia. Esta terrible cifra significa que desde el ejercicio 2016 murieron en la provincia una media de más de 950 ciudadanos que estaban a la espera de que se resolviera su grado de dependencia.