Un preso se sienta en el banquillo por clavarle a otro un pincho carcelario

El Penal número 1 juzgó ayer a un interno del centro penitenciario de Alcolea que supuestamente agredió a otro con un pincho "de elaboración carcelaria", un suceso por el que el fiscal solicitó en su escrito provisional de acusación cinco años de cárcel. La agresión se produjo el 7 de septiembre de 2007.

Según el relato del fiscal, el encartado se enfrentó "por viejas rencillas" con el otro recluso, al que supuestamente agredió con un arma que no ha sido recuperada. Según el fiscal, "lo acometió por la espalda", en un momento en que estaba desprevenido, "con la intención de menoscabar su integridad física" y le pinchó dos veces en la zona lumbar. La víctima cayó al suelo y el acusado, lejos de detenerse, "siguió intentando pincharle con el arma que esgrimía" y esta vez le dio en el pecho.