Salvador Vázquez: "Siento una relación muy buena y sana con la Orquesta de Córdoba"
Entrevista al director de la Orquesta
Tras una década de contactos con la formación musical, el malagueño será la batuta principal en las dos próximas temporadas
El primer concierto de abono se celebrará el próximo jueves, 19 de septiembre
'Esencia': la Orquesta de Córdoba vuelve a los orígenes en su temporada 2024-2025
Córdoba/Salvador Vázquez (Málaga, 1986) se pone esta temporada al frente de la Orquesta de Córdoba como director titular. Comenzará esta andadura el próximo jueves, 19 de septiembre, con el concierto de apertura de una temporada que promete ser apasionante. Hace una década, en 2014, Vázquez tuvo su primer contacto con la formación cordobesa, y en 2016 ganó el Concurso de Dirección. Durante todo este tiempo, prácticamente ha venido a Córdoba una vez al año a dirigirla. Ahora será su batuta principal hasta 2026 con un contrato prorrogable.
Pregunta.¿Cómo han sido los primeros contactos con los músicos de la orquesta?
Respuesta.Bueno, yo realmente empiezo la semana que viene, lo que pasa es que contacto sí he tenido con algunos profesores de la orquesta, alguna reunión, algunas llamadas... Siempre muy bien porque hasta ahora a mí la orquesta me ha tratado de maravilla todas las veces que he venido. Siento una relación muy buena y muy sana con ella.
P.¿Cómo afronta la temporada?
R.Con muchas ganas, mucha ilusión. Estoy muy contento de tener esta oportunidad porque es un paso importante para uno ser director artístico y titular de una institución como la Orquesta de Córdoba. Cuando esa oportunidad llega, evidentemente uno se deja la piel en que todo salga bien, en que todo esté bien, que haya una programación interesante tanto para el público, que es fundamental, porque ellos son nuestra razón de ser, como para la orquesta, que son los profesionales que día a día están tocando distintos repertorios. Entonces, tengo muchas ganas y muchas esperanzas puestas en que realmente esté todo el mundo feliz y contento de esta programación.
P. Aunque su designación fue tardía, ha tenido la oportunidad de hacer la programación...
R.Sí, la he hecho con Roberto, el gerente. Hemos hecho un buen equipo; digamos que yo propongo cosas y él es un poco el brazo ejecutor. Entonces, la verdad es que ha sido un trabajo muy intenso porque hemos tenido que hacer una temporada en dos meses, cosa que además es muy inusual, lo normal es tener siempre mucho tiempo de antelación. Las orquestas y los teatros trabajan con muchísimo tiempo de antelación. Claro, al llegar nosotros y tener que hacerlo todo desde febrero para presentarlo en junio ha sido una locura, pero lo hemos conseguido y creo que ha quedado una temporada muy interesante, muy variada y con obras del repertorio tradicional conocidísimas como la Quinta de Beethoven, así como once obras de nueva ejecución para la orquesta, que es la primera vez que van a tocarlas.
P.Aunque todo sea interesante, ¿qué recomendaría a alguien que no sea abonado y quiera ir algún día a ver a la Orquesta?
R. Por supuesto, recomendaría el primero del abono, porque aparte de que suene la Quinta van a ver en acción a dos profesores de la orquesta como solistas, que eso es el gran valor para mí de la programación, que los profesores de la orquesta también son protagonistas como solistas. Por supuesto, recomendaría el abono de diciembre, donde homenajeamos a Puccini, que este año es el centenario de su fallecimiento, y hacemos la Misa de Gloria, que es una de las obras que no se ha interpretado nunca, junto al Coro de Ópera. Habrá un concierto muy bonito en memoria de Lorenzo Palomo dentro del abono. Ya estaba ideado, porque además yo lo hablé con Lorenzo antes de que falleciera. Lamentablemente falleció y no podrá estar presente, pero haremos una obra suya para marimba y orquesta que se llama El Jardín de Baco. Luego, hay un abono también interesante que está cerca del Día Andalucía, con Rocío Bazán, donde haremos música española. El último abono va a ser muy interesante porque Les illuminations de Britten es una obra muy compleja, muy interesante, que también se hará por primera vez, y la Suite del Burgués Gentilhombre, que dirigirá Catherine Larsen Maguire. Yo creo que todos los conciertos son muy interesantes, sino uno no los programa. Es verdad que si uno tiene que elegir, pues tiene un poco estos highlights a los que se puede agarrar.
P.¿Cuáles son sus compositores y estilos predilectos?
R.Esa es otra difícil (ríe). Yo me siento muy cómodo con los compositores españoles y con el romanticismo. El compositor que más me fascina y que siempre me genera una admiración y una curiosidad enorme por seguir descubriendo cosas en su música, porque es muy denso el tejido orquestal y compositivo, es Gustav Mahler. No es un compositor que podamos afrontar mucho en la Orquesta de Córdoba porque normalmente su repertorio implica una gran orquesta. Por supuesto, Beethoven es una enorme referencia para mí, así como los compositores barrocos.
La orquesta y la ciudad tienen muchas fortalezas y potenciarlas también es nuestra labor"
P.La Orquesta está en una fase de cambio no solo por el director y por el gerente, sino también porque están entrando y van a entrar nuevos músicos. ¿Qué pueda aportar esta savia nueva?
R. Un cambio siempre trae dudas, por así decirlo, pero los cambios son buenos. Todo se va renovando y no es una renovación de golpe, porque los nuevos que entran están con los profesores de toda la vida y ahí se funden en un abrazo esas generaciones, por lo que al final sigue siendo el sello de la Orquesta de Córdoba. No son orquestas diferentes que nacen, sino gentes que van viendo cómo ha vivido, cómo respira la orquesta, cómo piensa, cómo toca, cómo se expresa. Entonces, digamos que ocurre esa comunión entre estas generaciones y es muy bonito. Es un empuje que venga gente joven que aporta esa energía, esas ganas, esa ilusión de los inicios.
P. ¿Qué impronta le gustaría dejar en la Orquesta de Córdoba?
R. Yo sería muy feliz si la orquesta cada vez tuviera más abonados, cada vez tuviera más seguidores, llegara cada vez a más gente; que siga manteniendo a su público fiel, abonado de siempre, y también pueda atraer a más gente joven, porque al final ellos son el futuro de nuestro mundo. El futuro del escenario es el público joven y atraerlos y acercarlos es un reto en la sociedad que vivimos, tan rápido todo, porque el contenido debe ser muy rápido y una sinfonía de Beethoven al menos la media hora no te la quita nadie. Ese es el reto y la ilusión de poder conseguirlo.
P. ¿Cómo está la plantilla de la orquesta? ¿Hay obras que no se pueden asimilar?
R.Sí, pero eso no es porque la orquesta no lo tenga, es porque las características de esta orquesta son así. Quiero decir, hay orquestas que son enormes y tienen una serie de instrumentos que pueden afrontar un repertorio y otras orquestas que son más pequeñas y afrontan otro repertorio. Eso no es una cuestión de "ay, no podemos hacerlo porque no tenemos" No, ese es el organigrama de la orquesta. Nosotros hacemos el repertorio del estilo de la orquesta y dentro de lo que hay en ella se pueden hacer muchas cosas, muchísimos repertorios. De hecho, yo pensaba al principio "a ver qué hacemos con el poco tiempo que hay para organizar la temporada", pero, sin embargo, ha salido una temporada con 11 obras de primera lectura que no implican un esfuerzo enorme a la hora de traer más plantilla, sino que se pueden hacer con la que hay.
P.¿Qué fortalezas tiene la Orquesta de Córdoba?
R.La Orquesta de Córdoba, entre otras, tiene su trayectoria, su historia, su prestigio, y yo creo que vivir en una ciudad como Córdoba, tan interesante, en un punto de explosión tan grande a nivel cultural, evidentemente la sitúa en un punto importante. Al fin y al cabo, yo creo que una orquesta sinfónica -que es una gran suerte que una ciudad tenga una orquesta sinfónica profesional- es el baluarte o la cima cultural de la ciudad.
Sería muy feliz si la orquesta cada vez tuviera más abonados, llegara cada vez a más gente"
P.Aquí también contamos con varios coros, tenemos los conservatorios... que también son un empuje cultural.
R.Evidentemente, de hecho, nosotros contaremos con el Coro de Ópera y con el Coro Ziryab. Vamos a hacer una colaboración con el Conservatorio Superior, que se anunciará pronto. Crear estas conexiones entre todas las instituciones de la ciudad genera fortaleza. Entonces, al final, si lo miramos, la temporada está llena de elementos de Córdoba: los coros, los conservatorios, compositores cordobeses y solistas cordobeses más allá de los profesores de la orquesta. Entonces, la orquesta y la ciudad tienen muchas fortalezas y potenciarlas es nuestra labor también.
P. ¿Qué puede aportar de la experiencia que ha tenido dirigiendo a tantas orquestas?
R. Ganas, juventud, energía, ilusión... Aparte, considero que, en cierto modo, por mi formación tengo cierta versatilidad con diferentes repertorios. Hay repertorios donde no me meto porque no me considero ni especialista ni solvente, pero afortunadamente para eso también podemos contar con directores invitados. Sobre todo quiero crear esa unión, ese equipo para poder remar todos juntos y conseguir siempre un buen resultado y un buen clima de trabajo.
P.La Junta ha anunciado una gira de las orquestas andaluzas por toda la comunidad. ¿Qué le parece esta iniciativa?
R. Magnífica. Me parece una idea muy necesaria desde hace mucho tiempo porque tengamos en cuenta que al final todas las orquestas tienen participación de la Junta y la Junta somos todos. Entonces, yo creo que es importante que a un jienense o a un gaditano también le llegue la cultura en modo de música sinfónica a través de estas orquestas que están radicadas cada una en su ciudad. Aparte, hay ciudades como Jaén o Huelva que tienen unos auditorios y unos espacios sonoros estupendos, por lo que también para la orquesta es muy positivo poder tocar ahí. Así que a mí me parece una iniciativa brillante. En otras comunidades, por ejemplo la Sinfónica de Castilla y León visita todas las ciudades y estamos hablando de una comunidad muy extensa a nivel de kilómetros.
P.Una reivindicación histórica de la orquesta es tener una sede. ¿Ha mantenido alguna reunión al respecto?
R. Todavía no, todavía no he podido. Y sé que es una reivindicación de siempre porque, además, desde que dirijo la orquesta lo llevo escuchando. Creo que hay que seguir en esa dirección y que la orquesta llegue a tener su sede. Eso es importantísimo para el desarrollo de la orquesta como formación sinfónica y es importante para que tenga una mayor estabilidad a la hora de trabajar su sonoridad. Al fin y al cabo, es una cuestión de estabilidad. Si tantas orquestas profesionales de España tienen una sede estable, creo que Córdoba también debe de tenerla. Aunque todavía no he tenido ninguna reunión, sí que sé que se está trabajando en esa dirección y hay algunas vías por ahí que se están explorando que es posible que puedan llegar a buen puerto.
P.Es curioso porque, por ejemplo, me ha nombrado a Huelva y a Jaén, que tienen buenos auditorios, pero no tienen orquesta, y nosotros al contrario.
R. Exacto, sí, es una cosa que a mí me resulta muy curioso. Son ciudades que han apostado en cierto sentido por tener auditorios, algunos son como palacios de congresos con auditorios muy grandes. Es verdad que Córdoba tiene los teatros del IMAE, que son fantásticos y son bellísimos, pero, bueno, es verdad que un espacio sonoro propio para la música sinfónica siempre es beneficioso.
P.¿Hay algún director o algún solista al que le gustaría traer y se ha quedado en el tintero?
R.Pues sí, pero eso ha dependido de lo que te contaba antes, de la rapidez con la que hemos tenido que hacer la programación y no había fechas disponibles. No sé, por ejemplo, podría decirte el caso de Marzena Diakun, que ha sido directora titular de la Orquesta de la Comunidad de Madrid. Ese ha sido un caso muy concreto de que no había fechas disponibles, pero de todas maneras hay todavía tiempo para poder reprogramar.Aunque ya estamos en marcha con esta temporada, evidentemente uno ya tiene la cabeza puesta en cuál es la siguiente línea, lo que pasa que evidentemente también quiero ver qué resultado da esto poco a poco para ir viendo por dónde tirar. Si no sería un poco dar palos de ciego.
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