¿Se puede proteger a nuestros hijos del lado oscuro de la red?
Publirreportaje
La era digital ha supuesto una revolución a todos los niveles, y la forma en que los niños acceden a la información y se relacionan no ha sido una excepción a la regla debido a la irrupción de internet y las redes sociales en la vida de los más pequeños. Pero toda revolución no tiene solo ventajas, sino también inconvenientes y en el caso de la red los riesgos y peligros en seguridad son uno de los más importantes. No obstante, siguiendo unos sencillos consejos, como los que propone Prosegur se puede sacar todo el provecho a los contenidos digitales sin perjuicio alguno.
Entre estas recomendaciones destaca que los niños menores de doce años no dispongan de un teléfono con acceso a internet, para evitar que puedan navegar por la red sin la supervisión y control de un adulto. Si hablamos del acceso desde casa, se recomienda que el dispositivo al que se conecten se encuentre en un lugar de la casa de uso común, a fin de facilitar que los padres puedan, en cualquier momento, asomarse para averiguar qué actividad realiza el niño. En ello también ayudan las herramientas de control parental, que, además, son capaces de filtrar las páginas web en función de sus contenidos o temas.
En lo referente a la educación que los padres deben darle a los hijos en el buen uso de la red, se debe poner el énfasis en cuatro pautas. La primera alertarles de la existencia del ciberbullying como una extensión en las redes sociales del acoso escolar y de lo importante que resulta denunciar cuanto antes este problema para atajarlo. La segunda advertir a los menores que la información y contenidos que se suben a la red después resulta muy difícil borrarlos. En tercer lugar, enseñarles que al igual que sucede en el mundo real tampoco hay que fiarse de los desconocidos en internet y no aceptar solicitudes de amistad de gente que no sepan quien son. Finalmente, el que no utilicen su verdadero nombre sino un apodo para denominarse a ellos mismo en las redes sociales es una garantía de que gente que no esté dentro del entorno del menor pueda contactar con él.
En definitiva, la formación y la concienciación de los más pequeños es fundamental para que los menores hagan un uso responsable de internet y tengan una actividad saludable en las redes sociales.
También te puede interesar