Dos presos que robaban y extorsionaban a otros en la cárcel de Córdoba agreden a los funcionarios que los reprendieron

Instituciones penitenciarias

El suceso se produjo en la tarde del sábado en el módulo 13, donde cumplen condena internos peligrosos

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Prisión de Alcolea, en Córdoba.
Prisión de Alcolea, en Córdoba.

Varios funcionarios heridos de diversa consideración es el resultado de una nueva agresión registrada en el centro penitenciario de Córdoba este sábado. CSIF ha denunciado que este incidente protagonizado por dos internos es el segundo episodio violento en 48 horas y el cuarto en menos de dos semanas, lo que "genera una enorme inquietud y malestar entre la plantilla".

Los hechos tuvieron su inicio sobre las 19:30 de ayer sábado, cuando se requirió la presencia de funcionarios en apoyo de los de servicio en el módulo 13 al detectarse que dos reclusos estaban entrando en las celdas del resto para robarles pertenencias y extorsionarles, una situación que provocó una "alteración regimental considerable en el citado módulo, caracterizado por su conflictividad".

El personal allí presente intentó normalizar el ambiente trasladando a los dos citados internos al módulo de aislamiento del establecimiento, pero ambos ofrecieron una "fuerte resistencia" con amenazas verbales, buscando el enfrentamiento físico con los profesionales y golpeando cristales y mobiliario.

Según CSIF, una vez en aislamiento, los reclusos se negaron a ser cacheados y comenzaron a vociferar y a encararse con los funcionarios. En ese momento, "se lanzaron contra ellos y les empezaron a golpear con patadas, puñetazos y cabezazos". Estas agresiones se saldaron con dos trabajadores lesionados en las manos, precisando de una primera atención médica en la enfermería y, posteriormente, en un centro hospitalario. El resto de funcionarios que intervinieron en la resolución del incidente sufrieron múltiples magulladuras y contusiones por todo el cuerpo.

CSIF exige medidas "más contundentes"

CSIF, sindicato mayoritario en la prisión de Alcolea, señala que “desde el pasado día 23 de abril, que fue el desencadenante aciago de un largo rosario de jornadas violentas, esta central sindical, comprometida sin excusas con la seguridad del centro y sus trabajadores, viene exigiendo al equipo directivo del centro y a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias medidas más responsables, profesionales y contundentes que atajen esta catarata continua de agresiones, así como la convocatoria con carácter extraordinario y de urgencia del Comité de Seguridad y Salud Laboral donde exigiremos, entre otras cosas, las responsabilidades que estimemos oportunas por estos hechos”.

CSIF Prisiones Córdoba ha concluido que, “sin ser considerados aún agentes de la autoridad, sin medios técnicos adecuados, sin cubrir el personal necesario ni formación actualizada y permanente y padeciendo un insufrible buenismo impostado, mucho nos tememos que estos o peores episodios violentos puedan seguir repitiéndose”.

Una reunión con la dirección el martes

Mientras, los sindicatos CCOO, APFP, Acaip-UGT y USO han recordado que esta es la segunda semana en la que los funcionarios hacen sonar los claxon de sus vehículos en señal de protesta por la "persistente inacción" de la dirección frente a las "reiteradas agresiones que sufren por parte de los internos". En este contexto, urgen a la subdelegada del Gobierno en Córdoba, Ana López, a dar respuesta a la petición de audiencia para abordar soluciones a esta "grave situación".

La nueva pitada se produce tras la agresión del sábado. Los sindicatos denuncian "con profunda preocupación esta grave situación". Y es que, inciden, "en tan solo una semana se han contabilizado cuatro agresiones a funcionarios, incidentes que, inexplicablemente, la dirección intenta minimizar clasificándolos de forma ambigua". Los trabajadores advierten de que "la falta de consecuencias severas para los agresores genera una tensión insostenible, exponiendo a los trabajadores a un estrés de altísimo nivel con graves secuelas psicológicas".

El próximo martes se celebrará una reunión extraordinaria con la dirección, donde los sindicatos esperan la "adopción urgente" de medidas efectivas para garantizar la seguridad de los trabajadores penitenciarios y "evitar una tragedia". De no obtener respuestas satisfactorias, han anuncido la convocatoria de movilizaciones.

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