Córdoba queda aletargada cuando llega el verano. Los turistas huyen a la costa, finalizan las campañas agrícolas importantes y la agenda se vacía de actividades culturales y de ocio. Para un territorio cada vez más centrado en los servicios y el agro, esta combinación es fatal, tal y como demuestran este martes los datos del mercado laboral referidos al recién finiquitado mes de julio. 

Y es que el número de personas registradas en las Oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) en Córdoba al finalizar la séptima mensualidad del año ha aumentado en 359 con respecto a junio (0,53%) como consecuencia de la finalización de las campañas agrícolas importantes y de la temporada alta del turismo. El Mayo Festivo, con los Patios, las Cruces y la Feria, queda ya muy lejos, y el Festival de la Guitarra, el gran acontecimiento del verano en Córdoba, indudablemente no tiene el tirón de las fiestas populares. De esta forma, el paro registrado se sitúa ya en 67.725 desempleados.

Eso sí, comparándolo con el año anterior, en la provincia hay 4.439 personas menos en las listas del paro, un 6,15% menos en cómputo relativo, lo que de alguna manera refleja la progresiva recuperación después del varapalo que supuso la llegada de la pandemia del covid-19.

La actualización de los datos del SEPE hace hincapié en algunos problemas recurrentes que presenta el mercado laboral en la provincia. La estacionalidad es uno de los principales, pues la economía se ve resentida cuando los flujos turísticos se trasladaran a otros lugares -esto ocurre cíclicamente, cada vez que llega el calor-, o las cosechas finalizan. Otro problema estructural es que, como ocurre mes a mes, el paro tiene indudablemente nombre femenino. Y es que las mujeres siguen siendo el colectivo más afectado por el paro. En cifras concretas: de los 67.725 desempleados que hay en Córdoba, 40.035 pertenecen al sexo femenino y 27.690 son hombres. De todas ellas, 

Por sectores productivos, la agricultura es el que más sufrió en la pasada mensualidad, aportando 390 desempleados -ahora son 8.247-; seguido de la construcción, con 173 -5.592 en el acumulado-, y de los servicios, con 68. Un inciso: aunque a simple vista parezca que este último sector resiste al verano, las cifras globales acumuladas trasladan un grave problema, y es que son 41.580 las personas en Córdoba que buscan un empleo en este ámbito. Por el contrario, el paro solo baja en la industria, con 92 parados menos -son 5.977 en total-, y en el colectivo sin empleo anterior, con 180 menos -6.329 en total-. 

En este último apartado, el desglose de cifras evidencia las dificultades que siguen teniendo los más jóvenes y los mayores de 44 años que intentan acceder al mercado laboral. Y es que del total de demandantes adscritos a este grupo, son 2.750 los menores de 24 años, mientras que los mayores de 44 son 1.765.

El SEPE también da detalles de cómo evoluciona el mercado laboral para los extranjeros residentes en Córdoba. Son 2.803 los desempleados que conforman este grupo, que mayoritariamente se dedican a los servicios (1.101), la agricultura (860), la industria (116) y en menor medida buscan un hueco en la construcción (95). Málaga y Almería son en todo caso las provincias con mayor volumen de mano de obra extranjera sin trabajo, con 15.607 y 15.325 personas, respectivamente. En el conjunto de Andalucía, son 64.291.

¿Y en qué situación se encuentra Córdoba si se tiene en cuenta la evolución del desempleo en el ámbito regional? Como ya avanzaba la estadística de junio, que también cerró de manera negativa para la provincia, el verano sienta mal aquí. Así, mientras que en la comunidad autónoma hay ahora 2.263 personas desempleadas menos por los efectos de la contratación en las provincias de costa, los territorios de interior quedan francamente tocados. Sevilla experimenta la peor evolución, con 1.356 desempleados más, y Cádiz la mejor, con 2.920 personas menos fuera de las listas del paro. El desempleo subió en Almería, Córdoba, Jaén y Sevilla, y por contra disminuyó en Cádiz, Málaga, Huelva y Granada.

El aumento del desempleo tuvo como consecuencia una reducción de las contrataciones, que fueron 25.722 en la provincia de Córdoba durante el mes de julio. Esto significa 5.453 menos que en el mes anterior o, de manera relativa, una caída del 17,49%. El punto positivo es que se firmaron 8.731 contratos indefinidos como consecuencia de la última reforma laboral. Así, desde principios de año, los trabajadores que se han beneficiado de este tipo de vinculación han aumentado el 565,47%, según los datos del SEPE. Por el contrario, entre enero y julio se firmaron un 44% menos de contratos temporales; el pasado julio fueron 16.991 en la provincia.

Respecto a las personas que reciben algún tipo de prestación, fueron 57.873 en junio, último mes del que existen datos. El subsidio es la ayuda más frecuente en Córdoba, con 28.742 beneficiarios. Le siguen el subsidio eventual agrario (14.321), la prestación contributiva (11.771) y la renta activa de inserción (3.039).