Los padres critican al alcalde de Posadas por apoyar el indulto

José Arias, el padre de las niñas de Posadas fallecidas por intoxicación en noviembre de 2006 a causa del plaguicida que usó su vecino, Bartolomé García, ya condenado en sentencia firme por la Audiencia, lamentó ayer que el alcalde maleno, Guillermo Benítez, haya apoyado la petición de indulto del homicida por imprudencia en lugar de mantenerse al margen.

Arias hizo así referencia al escrito que, en su calidad de alcalde y a petición del letrado de García, "es una persona de buena conducta en el municipio", donde reside con su familia. Con este domento se quiere acreditar el arraigo social del imputado, que fue condenado a dos años y medio de prisión por la Audiencia Provincial.

También llega a asegurar el regidor en su escrito, que el condenado "está plenamente integrado en la vida social, siendo en la actualidad responsable, entre otras, de una empresa familiar que da trabajo directo a unas 300 personas de esta localidad".

Ante esto, Arias consideró "normal que el alcalde apoye la petición de indulto, sobre todo si tenemos en cuenta lo que ya hizo, es decir, acompañar a mi casa para darme el pésame a quien ya sabía que era el culpable de la muerte de mis hijas", cuando ocurrieron los hechos, "pero luego no hemos vuelto a saber nade del alcalde, hasta ahora, y por ello le rogaría que, en un caso tan delicado como éste, se mantenga al margen y se dedique más a los temas del pueblo, en lugar de a hacer informes con verdades a medias, porque esos 300 puestos de trabajo a los que se refiere son eventuales".

Por otro lado, Arias argumentó que "quizás Bartolomé García no está tan integrado en Posadas como cree el alcalde o como afirma él mismo en su petición de indulto, porque también la acompaña de un informe médico, pero no hecho por ningún médico de Posadas, sino por uno que ejerce en Obejo, y con el que pretende alegar que su salud se resentiría con su ingreso en prisión", apuntó.

Finalmente y en cuanto a la solicitud de indulto como tal que hace para sí García, el padre de las niñas fallecidas dijo estar "indignado" por el hecho de que "ahora pide ayuda, cuando él la negó cuando se le pidió", refiriéndose con ello a que familiares de Arias y de su mujer preguntaron a García si sabía algo sobre el posible origen de la intoxicación que sufrían, "lo cual negó más de una vez". No obstante, acabó reconociendo que había empleado en su casa un plaguicida prohibido para el uso doméstico.

La sentencia considera probado que la intoxicación de las niñas se produjo por el fosfuro de aluminio del plaguicida.