Las operaciones de suelo pélvico en el Hospital Reina Sofía aumentan un 65% en los últimos tres años
Sanidad
Córdoba acoge un congreso de la Sociedad Andaluza de Ginecología y Obstetricia para analizar este problema propio de las mujeres
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Cada vez son más las mujeres que solicitan una consulta con el especialista en el Hospital Reina Sofía por problemas en el suelo pélvico. De hecho, el servicio de Ginecología y Obstetricia del centro sanitario ha anotado un aumento del 65% de este tipo de operaciones en los tres últimos años.
El suelo pélvico es un conjunto de músculos, ligamentos y tejidos que cierran la parte inferior de la pelvis y sostienen los órganos pélvicos como la vejiga, el útero y el recto. Cuando se debilita o sufre algún daño, surgen problemas como la incontinencia y el prolapso de órganos (descenso hacia el exterior por la cavidad vaginal).
La jefa del servicio, Ana Ortiz, explica que en el año 2022 intervinieron a 113 pacientes y en lo que va de 2025 ya son 192 pacientes, por lo que el incremento es "muy significativo". Los especialistas eran conscientes de que "iba a aumentar la demanda de consulta y la cirugía porque es una patología que está ligada al envejecimiento y cada vez se vive más años".
Por otro lado, es "una patología que ha permanecido durante mucho tiempo un poco oculta". Al respecto, añade que hace 30 años, una mujer de 70 "a lo mejor consideraba que era normal que se le escapase un poco la orina, se ponía su pañal, probablemente no tenía una vida activa ni pedía tener una buena calidad de vida" porque "prácticamente entendía que había terminado su ciclo vital más importante".
Sin embargo, hoy en día una "mujer de 70 años quiere salir, quiere tener buena calidad de vida, no quiere usar pañales y quiere que se le solucione su problema". "Antes era una vergüenza decir que se te escapaba la orina, ahora mismo se consulta en cuanto ocurre el problema", incide.
Este viernes y sábado, Córdoba acoge el X Congreso Andaluz de Suelo Pélvico de la Sociedad Andaluza de Ginecología y Obstetricia (SAGO), que está organizado por el servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Reina Sofía y reunirá a especialistas en diferentes disciplinas para abordar este problema de salud desde diferentes perpectivas.
Factores que favorecen este problema
Además del envejecimiento, hay otros factores que favorecen la aparición de los problemas de suelo pélvico. Uno de ellos es el estreñimiento crónico por los esfuerzos que se realizan y otro es la obesidad. En este sentido, la doctora Ortiz explica que cuando les llega a consulta una mujer con incontinencia y sobrepeso le recomiendan que pierda peso y muchas veces consiguen que se mejore su síntoma.
También son importantes los partos y la edad de la maternidad, que cada vez es más tardía. La doctora indica que el suelo pélvico de una mujer de 40 años es mucho más fibroso y más propenso a esta patología.
Por otro lado, son más propensas a sufrir esta patología las mujeres en cuyos trabajos cogen mucho peso y también las cuidadoras de personas dependientes, que tienen que hacer grandes esfuerzos para moverlas, vestirlas, asearlas, etc.
El estreñimiento, los partos y la menopausia favorecen la aparición estos problemas"
Además, con la llegada de la menopausia disminuye el nivel de los estrógenos, lo que también debilita los músculos en general y los del suelo pélvico en particular.
El perfil de las pacientes es muy diverso. La doctora Ortiz indica que hay un grupo que consulta por incontinencia urinaria (se les escapa el pipí o tienen muchas ganas de hacerlo y no les da tiempo a llegar al váter), mientras que otro grupo está formado por mujeres de más edad que consultan por notar un bulto en los genitales.
Cirugía robótica
La jefa de Ginecología y Obstetricia del Reina Sofía señala que si la incontinencia es leve, hay fármacos que pueden mejorarla, pero "cuando el problema ya está muy instaurado y hay un prolapso, muchas veces es necesario recurrir a la cirugía".
En este sentido, la doctora explica que en el servicio que coordina cada vez hacen más actividad quirúrgica relacionada con suelo pélvico y, además, han incorporado la cirugía robótica, que es mucho menos invasiva y tiene una estancia media de ingreso menor.
Los especialistas también realizan una técnica que consiste en la implantación de ácido hialurónico "en fracasos de cirugías previas".
En general, cuando la patología está muy instaurada hay que recurrir a la cirugía. Cuando las pacientes son muy mayores y con muchas enfermedades concomitantes existe lo que se llama el pesario, una arandela de silicona que se inserta en la vagina para dar soporte a los órganos pélvicos que han descendido y mantenerlos en su posición correcta.
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