Ana María López Losilla (Belmez, 1966) se ha presentado este lunes, de manera oficial, como la nueva subdelegada del Gobierno de España en Córdoba. Apenas lleva un mes en el cargo, pues su nombramiento fue anunciado el pasado 29 de diciembre por el representante del Ejecutivo nacional en Andalucía, Pedro Fernández, tras la renuncia de la Rafaela Valenzuela por motivos de salud.

Precisamente sus primeras palabras han ido dedicadas a su antecesora, la primera mujer que asumió este puesto en la provincia de Córdoba (2018-2023), alabando su "trabajo bien hecho en una época durísima como la pandemia" y a quien que ha deseado "una pronta recuperación".  

En su discurso de presentación, la nueva subdelegada ha dejado claro que su leit motiv para los próximos cuatro años será "huir de la confrontación y cooperar con todas las administraciones", consciente de que aterriza como representante del Ejecutivo de Pedro Sánchez en un contexto que está excepcionalmente marcado por las acusaciones que le llueven desde la Junta de Andalucía y la Diputación de Córdoba por la falta de infraestructuras hidráulicas y de capacidad energética en el Norte de Córdoba.

"Es una mujer con voluntad de diálogo y muy profesional", corroboran quienes la conocen de cerca. El delegado del Gobierno en Andalucía también se ha referido a ella como a una persona con "perspectivas muy amplias" y "habilidades para el diálogo", dos características indispensables para un puesto que requiere horas de despacho y atención directa a la ciudadanía y el resto de administraciones. 

Entre los retos que López Losilla afronta por delante se encuentran la sequía, el reto demográfico y despoblación en la provincia, el cambio climático, la transición energética o la incesante lucha contra la violencia de género, dotado de más medios a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.

También hereda otros proyectos ilusionantes que comenzaron su andadura en la etapa de Rafaela Valenzuela, como la construcción de la futura de la Base Logística del Ejército de Tierra, la nueva comisaría de Policía Nacional o el establecimiento de la actividad regular en el Aeropuerto de Córdoba, así como una nueva ampliación de la pista de aterrizaje y la terminal, ha destacado en su intervención

Sobre la sequía que afecta a toda la provincia, su principal preocupación, la subdelegada del Gobierno ha asegurado que es un problema que "nos obliga a ser ágiles en la toma de decisiones y a anticiparnos a las emergencias que se deriven de la falta de agua", por lo que ha señalado su compromiso para "coordinarse con el resto de administraciones", como ya ha manifestado en sus primeras reuniones con los representantes de la Junta y la Diputación, según ha confirmado.

La subdelegada también ha hecho hincapié en su convencimiento de adoptar políticas sostenibles e impulsar planes de transición energética apostando por las renovables para combatir el cambio climático. En este sentido, se ha referido a la necesidad de acogerse a programas como el fondo de transición justa que ya aprobó la Junta con fondos europeos . 

En tercer lugar, se ha referido al desarrollo de la base logística como el "gran revulsivo" que será clave durante su tiempo en el cargo, tanto para la "atracción de nuevas empresas como en la creación de empleo de calidad en la provincia para reducir las cifras de desempleo y para retener el talento".

Para enfrentar los desafíos, la subdelegada ha pedido la implicación de los agentes sociales, empresarios y administraciones. Por su parte, se ha comprometido a trabajar los próximos años para "defender los intereses de los cordobeses", resaltando su "compromiso feminista y ecologista", y con el objetivo de "lograr un impacto positivo en la ciudad".

Experta en Medio Ambiente

López Losilla ostentaba desde 2009 el puesto de jefa del Departamento de Medio Ambiente de la Diputación de Córdoba. Es funcionaria de carrera Grupo A1 dentro de la institución provincial (técnica superior de Medio Ambiente) con 25 años de experiencia y ha trabajado como bióloga, según se desprende en su currículum, tras haberse licenciado en Ciencias Biológicas, hacer un máster en Medio Ambiente y experta en Gestión de Espacios Naturales por la Universidad de Córdoba. 

Además, era concejala del PSOE en el Ayuntamiento de Córdoba en el actual mandato tras concurrir como número seis en las listas de las pasadas elecciones municipales -cargo del que renunció en enero- y es vocal de la Ejecutiva socialista del distrito de Poniente Sur. Su arraigo al partido viene heredado de su padre, marmolista de profesión, que formó parte de la primera corporación socialista de la etapa democrática en Belmez.