Entre los materiales más novedosos y revolucionarios está el microcemento, que es muy versátil y sus usos son infinitos, tanto en proyectos de casas y pisos residenciales como oficinas, lugares comerciales, naves industriales, piscinas y espacios deportivos.
Si se quiere instalar microcemento en Córdoba o en otra ciudad, solo hay que leer este post con toda la información sobre este material que cada día se usa más en diversidad de lugares.
¿Qué es el microcemento?
Se trata de un revestimiento hecho con base de cemento, pigmentos, resinas y otros aditivos que es continuo y sin juntas, de diversos colores y acabados en texturas variadas para todo tipo de construcción o reforma.
Se aplica a manera de finas capas de unos 3 milímetros de grosor que puede colocarse sobre baldosas, mármol, concreto, cemento, pladur y hormigón sin ningún problema y con un acabado perfecto.
Por todo lo anterior es lo más recomendable para renovar completamente todo tipo de espacios, los cuales, gracias a su paleta de casi 50 colores, se verán por completo remozados.
Tipos de Microcemento
Cada uno de los proyectos planificados puede ser tratado con una capa de microcemento, bien sea en proyectos como cocinas o tan disímiles, como naves industriales. Todo esto, gracias a que existen diversos tipos aplicables en cualquier obra.
Básicamente, hay cuatro tipos diferentes de microcementos:
Microcemento tradicional
El microcemento tradicional, también llamado microfino, tiene una apariencia parecida al estuco, pero muchísimo más resistente, por lo que se puede utilizar en el pavimento. Su principal característica es un acabado liso perfecto.
Microcemento Microhormigón
El microcemento denominado Microhormigón es el que se recomienda para suelos sometidos a medio o alto tránsito. Su nombre deriva del hormigón usado tradicionalmente en naves industriales o lugares que ameriten resistencia y a la vez belleza y facilidad de limpieza. Se recomienda para sitios muy transitados.
Microcemento Microstone
El microcemento Microstone es texturizado o rugoso con la principal peculiaridad de ser antideslizante. Por eso es usado en exteriores y se recomienda para patios, aparcamientos, piscinas, descansillos. Es el tipo de microcemento más resistente existente en el mercado.
Cada uno de los tres tipos de microcemento mencionados están ideados para ser aplicados de manera continua en todo tipo de superficies, pero de predilección, las amplias, que necesitan resistencia y durabilidad.
Características del microcemento
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Es un material con muy alta resistencia y soporta el alto tránsito de personas o vehículos. Además, no pierde sus cualidades ante las inclemencias del clima. Esto lo hace idóneo para ser aplicado en proyectos de todo tipo en interiores o exteriores.
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Es impermeable, lo que es ideal para superficies como baños, cocinas, piscinas, aparcamientos, garajes, fachadas externas y mucho más.
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Posee un acabado muy estético por lo que sus usos son, prácticamente, ilimitados y como viene en gran gama de colores es propicio para cualquier proyecto.
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Es antideslizante, por lo que es ideal para exteriores, piscinas, o lugares transitados por niños y personas mayores.
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Se puede aplicar en todo tipo de superficies, aun si no están en buen estado, solo se debe acondicionar antes, para lo cual se tienen que eliminar las partes sueltas o en mal estado.
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Ofrece mucha durabilidad.
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Se aplica rápida y fácilmente, solo basta preparar la mezcla y aplicarla sobre la superficie y es necesario remover el suelo existente.
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Su grosor mínimo de unos 3 milímetros ofrece prestaciones al 100%.
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Es muy fácil de mantener y limpiar.
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Su aplicación no trae variaciones en las cotas ni las altimetrías.
¿Cuánto cuesta poner microcemento?
El microcemento es el revestimiento que está compuesto por una base de cemento al que se le agregan aditivos, polímeros o resinas y pigmentos, entre otros, para brindar un resultado de una cubierta con enorme capacidad de adherencia y gran posibilidad o alternativas de usos.
Gracias a esta adherencia que posee es un material muy popular, sobre todo en las reformas porque no hay que remover las superficies sobre las que se va a aplicar y no genera ningún tipo de escombros, por eso es más barato, pues se aplica directamente.
El precio para aplicar microcemento oscila entre los 35 y 100 euros el metro cuadrado, dependiendo del tipo y de la preparación, según la superficie. Pero casi siempre se paga entre 40 y 60 euros el metro cuadrado.
